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Bloomberg — Una medida de los precios recibidos por los fabricantes y proveedores de servicios en Estados Unidos subió a un récord en abril, a medida que las empresas trasladaron los mayores salarios y costos a los clientes, lo que avivó aún más las presiones inflacionarias.
Un informe de S&P Global publicado el viernes también mostró que un índice de crecimiento de los precios de los insumos se disparó a un máximo histórico, lo que refleja el aumento de los costos de las materias primas, el combustible, el transporte y la mano de obra. Las presiones sobre los precios que se observan tanto en el sector manufacturero como en el de servicios sugieren que la inflación seguirá siendo elevada en el futuro inmediato.
“Muchas empresas siguen informando el viento de cola de la demanda reprimida por la pandemia, pero las empresas también se enfrentan a los desafíos cada vez mayores de la creciente inflación y la presión en el costo de la vida, así como a los persistentes retrasos en las cadenas de suministro y las limitaciones laborales”, dijo Chris Williamson, economista jefe de negocios de S&P Global.
En abril, los nuevos negocios entre los proveedores de servicios disminuyeron a un mínimo de tres meses debido a que las persistentes restricciones de la oferta limitaron la capacidad y la inflación frenó la disposición de los consumidores a gastar. Aun así, la relajación de las restricciones de viaje estimuló el mayor ritmo de nuevos pedidos de exportación en datos que se remontan a 2014.
Por su parte, los fabricantes experimentaron el mayor crecimiento de nuevos pedidos en siete meses, impulsado por un aumento de la demanda extranjera. La producción se aceleró, y el índice de gerentes de compras de los fabricantes estadounidenses avanzó al mayor nivel desde septiembre.
En general, el PMI compuesto flash de EE.UU. de S&P Global, una medida de la actividad empresarial, cayó 2,6 puntos a 55,1. Las lecturas superiores a 50 indican crecimiento.
En la eurozona, la actividad repuntó sopresivamente hasta un máximo de siete meses. La mejora en los servicios fue liderada por un aumento sin precedentes en el turismo y el ocio, mientras que el crecimiento de la producción de los fabricantes se desaceleró al ritmo más lento en casi dos años.
Ante la guerra de Rusia con Ucrania y las estrictas medidas para controlar el Covid-19 que China ha implementado en algunas de sus mayores ciudades, es poco probable que se produzca una mejora significativa en las atascadas cadenas de suministro del mundo en el corto plazo.
Los retrasos en los proveedores de servicios y los fabricantes aumentaron en abril al segundo ritmo más rápido en datos que se remontan a 2009. Los plazos de entrega de los proveedores se alargaron.
Si bien retener y atraer nuevos trabajadores sigue siendo un problema para las empresas, el empleo creció a un ritmo sólido en abril, aunque se desaceleró un poco con respecto al mes anterior.