Bogotá — El dólar se ubicó ayer martes por encima de los $4.000, rompiendo su máximo histórico en Colombia, lo que ha sido relacionado con la pérdida del grado de inversión, el precio de las materias primas y las preocupaciones sobre la variante delta de la covid-19.
Este comportamiento “ha sido el reflejo del contexto de mayor incertidumbre en los mercados ante el avance de la variante delta (...) este entorno ha llevado a que, por un lado, el valor del dólar a nivel global muestre mayor fortaleza (medido a través del índice DXY) y a que las principales referencias de crudo nuevamente se estén cotizando por debajo de los US$70 por barril ante el efecto negativo previsto que puede generarse sobre la evolución de la demanda”, explica la Dirección de Investigaciones Económicas, Sectoriales y de Mercado de Bancolombia.
Desde el frente local, agrega, influye una mayor percepción de riesgo país, el menor ritmo de monetizaciones por parte del Gobierno nacional de los recursos que ha conseguido en los mercados y la ampliación del desbalance externo.
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El analista de mercados en OANDA, Edward Moya, dijo a Bloomberg Línea que “la recuperación económica en Colombia viene mejorando y la confianza del consumidor se eleva al nivel más alto de las últimas dos décadas”.
“Las presiones actuales sobre los precios probablemente obligarán al Banco de la República a subir las tasas de interés en septiembre, lo que podría ser un obstáculo para el índice Colcap, pero, a su vez, de apoyo para el peso colombiano”.
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Sin embargo, estima que la divisa estadounidense podría seguir ganando terreno en los próximos días y que un incremento en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal puede ser un apoyo adicional para el dólar hacia finales de año.
La debilidad mostrada por la moneda colombiana puede ser de corta duración y probablemente se revertirá una vez que se alivien las preocupaciones por el impacto de la variante delta en la economía del país.
Analista de mercados en OANDA, Edward Moya.
Germán Cristancho, analista de Davivienda Corredores, señala a Bloomberg Línea que el dólar se ha seguido fortaleciendo “presionado por el bajo apetito por riesgo global y por las expectativas de menor liquidez en dólares para los próximos meses por parte de la Reserva Federal, en medio del importante aumento de la inflación y caída del desempleo en EE.UU.”.
“El peso colombiano sigue siendo una de las monedas más devaluadas en lo corrido del año por factores locales como el deterioro de la cuenta corriente y la subida en las primas de riesgo a la espera de las elecciones presidenciales del 2022. Con esto, el dólar en Colombia ha vuelto a negociarse muy cerca de $4.000”.
El economista principal de Scotiabank Colpatria, Sergio Olarte, complementa en entrevista con Bloomberg Línea que lo que está haciendo que la tasa de cambio suba es el aumento del riesgo luego de que Fitch Ratings le quitara el grado de inversión al país, así como la incertidumbre por las protestas y la reforma tributaria.
“Después de esto se ha visto que la política monetaria en otros países está siendo más agresiva que en Colombia, es decir, la tasa interés en otros países como México, Brasil o Chile ha venido subiendo más rápido que en Colombia, por ello algunos inversionistas prefieren irse a estos países porque generan mayor rendimiento”, apuntó.
Frente a la subida de ayer, afirmó que los operadores de mercado tienen niveles psicológicos importantes y “el $4.000 es uno de estos. Allí la gente comienza a darse cuenta que el peso colombiano empieza a ser relativamente barato frente al dólar de Estados Unidos”.
Empiezan los exportadores, por ejemplo, a vender el dólar pensando en que ya es un nivel suficiente para recuperar su inversión en términos financieros, comienza a haber flujo de inversionistas especuladores pensando que la tasa de cambio es atractiva.
Economista principal de Scotiabank Colpatria, Sergio Olarte.
Sumado a estos factores, “ayer fue un día especial porque se devolvió esa aversión al riesgo tan importante que teníamos en días pasados cuando tuvimos un petróleo subiendo y las monedas de la región también apreciándose porque los miedos de crecimiento se están desvaneciendo un poco. Se juntan estos dos factores haciendo que la tasa de cambio haya caído un poco. Esperamos que siga cediendo en los próximos dos meses”.
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