Bloomberg — Los precios al consumidor en Chile subieron el mes pasado más del doble de lo que esperaban los analistas, lo que corrobora la reciente sorpresiva decisión del banco central de aumentar la tasa de interés al nivel más alto en más de 20 años.
El índice de precios al consumidor subió un 1,2% en enero, lo que se compara con una estimación media del 0,5% de los analistas encuestados por Bloomberg. Frente al año anterior, el IPC registró un incremento del 7,7% y completa 11 meses consecutivos de alzas, informó el martes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Se esperaba que la tasa de inflación bajara al 7%.
Las cifras suponen más malas noticias para los encargados de la política monetaria, que han elevado los costos de endeudamiento en 500 puntos base desde julio, sin que haya señales de que la inflación vuelva pronto a la meta del 3%. El fuerte gasto de los consumidores y el aumento de los costos de las materias primas mantienen los precios bajo presión. El ministro de Hacienda saliente, Rodrigo Cerda, dijo en una entrevista la semana pasada que los aumentos del costo de la vida se desacelerarán a fines de este año.
Los precios subieron en todas las categorías. Los costos del transporte aumentaron un 2,8% en el mes, mientras que los alimentos y las bebidas no alcohólicas se incrementaron un 1,6%, según el INE.
El Banco Central de Chile sorprendió a los mercados financieros el 26 de enero con un alza de 150 puntos base de la tasa de interés. En el comunicado que acompañó la decisión, los consejeros del banco central señalaron que los datos de actividad recientes han estado por encima de las proyecciones y que existen importantes riesgos inflacionarios.
La semana pasada, el presidente saliente, Sebastián Piñera, nombró a Rosanna Costa como la primera presidenta del Banco Central. Se espera que Costa, que ha sido miembro del consejo del banco desde 2017, continúe con los aumentos de la tasa de interés.