Bloomberg — La aviación israelí lanzó múltiples ataques contra la Franja de Gaza este miércoles, mientras que los militantes palestinos respondieron disparando cohetes contra el sur y el centro de Israel.
Los ataques se produjeron un día después de que Israel llevara a cabo un ataque sorpresa antes del amanecer en el que murieron tres altos mandos de la Yihad Islámica Palestina, apoyada por Irán, otros dos militantes y diez civiles.
Como consecuencia de los ataques con cohetes, la vida en el sur de Israel quedó prácticamente paralizada, se evacuaron ciudades y más de 1,5 millones de personas se refugiaron en refugios antiaéreos, dijo el vocero israelí, el contraalmirante Daniel Hagari. Las defensas antimisiles Cúpula de Hierro estuvieron operativas durante todo el bombardeo, interceptando los proyectiles.
Los ataques continuaron y el miércoles se informó de la muerte de cuatro palestinos, entre ellos un niño. Las calles de la Franja de Gaza se vaciaron mientras los palestinos buscaban refugio. En Israel, las alertas se extendieron más allá de los pueblos y las tierras de cultivo del sur de Israel hasta Tel Aviv, el centro comercial del país.
“Estamos preparados para la posibilidad de una campaña ampliada y duros ataques contra Gaza”, declaró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Israel emprendió esta última campaña contra la Yihad Islámica después de que el grupo militante lo bombardeara con más de 100 cohetes la semana pasada tras la muerte por huelga de hambre de uno de los miembros de la organización en una prisión israelí.
Israel ha pedido a los dirigentes de Hamás en Gaza que se mantengan al margen de los combates, al tiempo que ha advertido de que está dispuesto a entrar en hostilidades más amplias si se le presiona. Hagari declaró en una rueda de prensa que Hamás estaba aguantando el tirón hasta el momento.
“La pelota está en la Franja de Gaza”, afirmó.
La vida en Gaza se paralizó el miércoles. Los colegios e institutos estaban cerrados y la mayoría de los comercios, excepto bancos y tiendas de alimentación, también. En una panadería de la ciudad de Gaza, decenas de personas hacían cola para comprar pan de pita mientras la gente se abastecía por temor a que escaseara en el enclave. Los accesos de entrada y salida de Gaza están controlados por Israel y Egipto desde que Hamás sustituyó en 2007 a la Autoridad Palestina, respaldada por Occidente.
“El gobierno de ocupación y su ejército son los únicos responsables del aislamiento”, declaró Daoud Shehab, dirigente político de la Yihad Islámica. “La respuesta al asesinato goza de consenso nacional sobre el terreno, y las filas palestinas están unificadas”.
El sur de Israel ha estado en alerta máxima en previsión de combates más amplios. Comunidades enteras fueron evacuadas más al norte, se bloquearon las carreteras y se paralizaron los trenes con destino a la zona. Los pacientes de los hospitales del sur y de la zona de Tel Aviv fueron trasladados a lugares más seguros, informaron los medios de comunicación israelíes.
Una casa de la ciudad meridional de Sderot fue alcanzada por cohetes el miércoles, pero no había nadie en su interior.
Hamás y la Yihad Islámica cuentan con el apoyo de Irán, al igual que el grupo militante libanés Hezbolá, que al igual que los demás rechaza la existencia de Israel. El martes, Netanyahu acusó a Irán de intentar cercar a Israel y advirtió de que su ejército estaba preparado para participar en una guerra con múltiples frentes si se le obligaba a ello.
“El 95% de los problemas de seguridad de Israel se derivan del fanático régimen iraní: su amenaza nuclear, la amenaza de los misiles, el anillo de terrorismo y agresión con el que Irán intenta rodearnos”, dijo.
El mes pasado, Hamás lanzó la mayor andanada de cohetes contra Israel desde Líbano desde que ambos países entraron en guerra por última vez en 2006.
Los combates en la frontera entre Gaza e Israel estallaron por última vez en agosto, durante tres días de enfrentamientos desencadenados por el asesinato de un dirigente de la Yihad Islámica.
Desde hace un año, Israel también lleva a cabo operaciones militares en Cisjordania ocupada contra presuntos militantes, muchos de ellos de la Yihad Islámica. Israel afirma que las redadas tienen por objeto anticiparse a los atentados e interrumpir las operaciones militares.
Este año han muerto en Cisjordania más de 100 palestinos, entre ellos decenas de militantes. Los atentados palestinos contra israelíes han causado la muerte de al menos 20 personas en ese periodo.
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