Bloomberg — China está vendiendo grandes volúmenes de soja de sus reservas estatales, mientras intensifica las compras a EE.UU. para cumplir un aparente acuerdo entre ambos países a finales de octubre.
Pekín suele subastar soja para gestionar y rotar los suministros de sus cuantiosas reservas estatales, pero éstas son las primeras ventas desde que reanudó las compras a EE.UU. tras la tregua comercial con Washington.
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Ya se han celebrado dos subastas desde el pasado jueves, con unas 720.000 toneladas vendidas del más de un millón de toneladas ofertadas, según declaraciones oficiales y la consultora china Mysteel. Las autoridades celebrarán otra subasta por 550.000 toneladas el viernes.
La soja, utilizada principalmente para la alimentación animal y el aceite de cocina en China, se ha convertido en un indicador del estado de las relaciones entre las dos mayores economías del mundo desde la cumbre celebrada en Corea del Sur entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping.
Las empresas estatales chinas empezaron a comprar soja estadounidense en los días previos a la reunión, y se habían hecho con un total de 2,5 millones de toneladas a mediados de noviembre. Ha habido más compras desde entonces, pero el cierre del gobierno estadounidense ha retrasado los datos sobre el último total. Las trituradoras privadas, mientras tanto, se han mantenido en gran medida alejadas de los granos, que todavía incurren en un arancel de importación del 13% y siguen siendo poco rentables de procesar.
Se espera que China compre al menos 12 millones de toneladas de soja estadounidense para finales de febrero, según las últimas declaraciones de funcionarios de Washington. Pekín no ha confirmado oficialmente esas cifras, pero ha tomado medidas para reducir los aranceles sobre la cosecha y ha levantado las prohibiciones de importación a tres exportadores estadounidenses. Los cargamentos suelen tardar alrededor de un mes en llegar a China, y será necesario almacenarlos a gran escala si no se trituran inmediatamente.
En el alambre
Los mercados chinos se han despojado este año de la etiqueta de “no invertibles”. Para enterrarla definitivamente, los inversores dicen que es necesaria una aceleración de la economía nacional para que el alcismo no se esfume.
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China ha iniciado la construcción de la mayor presa hidroeléctrica del mundo, un proyecto que será mucho mayor que la presa de las Tres Gargantas y más caro que la Estación Espacial Internacional.
La china Luckin Coffee Inc. está considerando hacer una oferta por Blue Bottle Coffee de Nestlé SA para impulsar su perfil de marca y expandirse en el segmento del café premium, según personas familiarizadas con la situación.
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