Bloomberg — Las fuerzas rusas lanzaron un ataque con misiles y aviones no tripulados por toda Ucrania, matando a civiles y alcanzando objetivos energéticos mientras los negociadores seguían adelante con las conversaciones para poner fin a una guerra de casi cuatro años.
El presidente Volodymyr Zelenskiy dijo que los ataques contra varias regiones ucranianas, con unos 650 drones y más de 30 misiles, se produjeron “en medio de las negociaciones”, mientras el equipo de Kiev regresaba a su país de las conversaciones con funcionarios estadounidenses en Florida.
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“Este ataque ruso envía una señal extremadamente clara sobre las prioridades de Rusia”, dijo Zelenskiy el martes en X. Fustigó el ataque, que tuvo lugar “antes de Navidad, cuando la gente simplemente quiere estar con sus familias, en casa y a salvo”.
En el frente diplomático, el presidente estadounidense, Donald Trump, cuya administración está presionando cada vez más a Kiev para que acepte un acuerdo de paz con Rusia, dijo que el esfuerzo estaba avanzando. Las conversaciones “avanzan”, dijo el mandatario estadounidense a los periodistas en Florida en respuesta a una pregunta sobre si las conversaciones a tres bandas entre Washington, Kiev y Moscú podrían ser el siguiente paso.
Zelenskiy también ha expresado su optimismo sobre un resultado. Hablando con los periodistas a última hora del lunes, el líder ucraniano dijo que una paz justa, el fin del conflicto y “al menos” una victoria diplomática ucraniana están entre los objetivos de Kiev. El equipo negociador regresa tras haber hecho todo lo posible en las rondas iniciales, afirmó.
En un discurso por video, Zelenskiy dijo que esperaba recibir un “informe completo” sobre los borradores a primera hora del martes.
Al menos tres civiles, entre ellos un niño, murieron y muchos resultaron heridos al registrarse explosiones en las primeras horas en las regiones central, meridional y occidental del país asolado por la guerra, según informaron las autoridades. El Ministerio de Energía y el operador de la red Ukrenergo impusieron cortes de electricidad de emergencia.
Las infraestructuras energéticas y portuarias se vieron afectadas en la región de Odesa, en el Mar Negro, según las autoridades. El viceprimer ministro Oleksiy Kuleba citó daños en almacenes, infraestructuras energéticas y un buque civil que transportaba soja bajo bandera libanesa, según un mensaje en Telegram. No se informó de víctimas mientras se restablecían las operaciones, dijo.
La primera ministra ucraniana, Yuliia Svyrydenko, que lo calificó de “ataque ruso deliberado y cínico” en vísperas de las vacaciones de Navidad, dijo que las instalaciones energéticas del oeste de Ucrania fueron las más afectadas.
Los edificios residenciales, así como las casas, resultaron dañados en muchas zonas, según las autoridades locales. La vecina Polonia desplegó aviones de combate según el procedimiento ante la amenaza, según los militares.
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Maxim Timchenko, director ejecutivo de la mayor empresa energética privada de Ucrania, DTEK, declaró que Ucrania se enfrenta a su invierno más difícil desde que comenzó la invasión a gran escala en febrero de 2022, con un bombardeo sostenido sobre el sistema energético del país mientras las temperaturas descienden por debajo de cero.
“Hoy lo que necesitamos es, número uno, defensa aérea; número dos, equipamiento; y número tres, financiación”, dijo Timchenko a Bloomberg Television el martes.
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