Ciudad de México — México podría perder más de MXN$200.000 millones de recaudación al cierre de 2022 debido a la aplicación de estímulos fiscales a las gasolinas y diésel para evitar aumentos en los precios al público por encima de la inflación, de acuerdo con dos expertos en finanzas públicas consultados por Bloomberg Línea.
A través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el Gobierno activó el 4 de marzo nuevos estímulos fiscales para controlar los precios de los combustibles y evitar que el alza en el precio del petróleo a nivel internacional, debido a la guerra en Ucrania, afecte el poder adquisitivo de los consumidores.
Se trata de estímulos fiscales complementarios a los combustibles automotrices vía el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA), los cuales se suman al estímulo fiscal existente desde 2017 al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que se cobra por cada litro de gasolina y diésel.
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Con esta política de estímulos fiscales el Gobierno busca suavizar el precio al público de los combustibles cada que hay fluctuaciones del petróleo derivadas de la evolución de los precios internacionales del crudo.
Sin embargo, este año la aplicación de esa política significará importantes pérdidas recaudatorias en medio de una débil recuperación económica que pone en duda si se logrará la meta de ingresos tributarios aprobados en la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) 2022.
Cifras de Hacienda indican que en 2021 la pérdida recaudatoria por la aplicación del estímulo fiscal al IEPS ascendió a MXN$128,691, la cifra más elevada desde 2016, año en que inició en México la implementación de la liberalización de precios de las gasolinas.
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Esa pérdida de recaudación del IEPS se dio en un contexto de niveles de estímulos fiscales que nunca llegaron al 100% de la cuota del impuesto en 2021, de hecho, la gasolina Magna no tuvo estímulo fiscal durante las primeras cinco semanas del 2021, mientras que la gasolina Premium no tuvo estímulo las primeras ocho semanas y el diésel durante las primeras siete.
Sin embargo, en este 2022 y durante las mismas semanas, la situación es distinta.
Los combustibles tuvieron estímulo fiscal desde el primer día del año y este fue aumentando conforme el precio del petróleo ascendía, de tal forma que en la séptima semana del año (12 al 18 de febrero) Hacienda aplicó a la gasolina Magna, por primera vez, un estímulo fiscal de 100% a la cuota del IEPS, lo que implica renunciar a la recaudación de ese impuesto.
Pero con los niveles de estímulos fiscales observados hasta ahora y considerando que el petróleo seguirá presionado por el efecto de la guerra en Ucrania, se estima que la pérdida recaudatoria de IEPS será mayor a la registrada en 2021 y, además, habrá que añadir la menor recaudación de ISR e IVA.
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Víctor Gómez Ayala, académico del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y exfuncionario de Hacienda, estima que la recaudación del IEPS podría tener una caída de entre MXN$150.000 y MXN$270.000 millones, considerando un precio promedio del petróleo mexicano de entre US$80 y US$95 por barril en 2022.
Indicó que ese monto sería lo que se perdería respecto de lo aprobado en la LIF para 2022.
Adicional a ese costo fiscal, también habrá que considerar la pérdida recaudatoria de los nuevos estímulos vía IVA e ISR, la cual Gómez Ayala estima entre MXN$100.000 y MXN$200.000 millones.
“El Gobierno federal recibirá más ingresos por venta de petróleo y por otro lado necesitará gastar más en estímulos al IEPS para mantener la promesa de que no incrementen más las gasolinas que la inflación. El resto del año sí podríamos esperar un efecto neto negativo de entre 20 mil y 60 mil millones de pesos”
Víctor Gómez Ayala, ITAM
Carlos Ramírez, consultor en Integralia, estimó que la pérdida recaudatoria podría ser de MXN$200.000 millones al cierre del 2022, considerando un consumo diario de 100 millones de litros diarios de gasolinas y una cuota de IEPS de $5 pesos.
Tonatiuh Vázquez, coordinador de transición energética y finanzas públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), dijo que en 2021, un año en el que los precios del petróleo no estuvieron tan altos y no se activó el estímulo todo el año, se dejaron de recaudar más de MXN$100.000 millones.
“En 2022 vemos arriba de US$100 el barril, un nivel muy por arriba de lo presupuestado, y ahora se anuncia un sobre estímulo. La renuncia recaudatoria sí va a ser considerable y realmente no vemos que sea compensando con los ingresos petroleros, tan solo en enero los ingresos del petróleo estuvieron por abajo del calendario”
Tonatiuh Vázquez, CIEP
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