Petroperú registró pérdida de 60,9 millones de dólares entre julio y septiembre

La empresa estatal peruana sigue enfrentando una situación compleja. Esto fue lo que mencionó sobre sus problemas de liquidez y respecto a los avances en la refinería de Talara

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Lima — Los últimos resultados financieros de la empresa estatal peruana Petroperú reflejan la situación compleja en la que se encuentran sus finanzas: durante el tercer trimestre de este año la compañía registró una pérdida de US$60,9 millones, mayor a la pérdida de US$38,3 millones que obtuvo en el mismo período del año anterior, debido a una reducción en su utilidad bruta.

La reducción de la utilidad de Petroperú se debió a diversos motivos. La empresa explicó que en principio se debió a los menores ingresos por la venta de combustibles a raíz de un menor volumen, ante la demora que se dio para recibir gasolina y diésel por parte de sus proveedores “por dificultad de pagos”.

Además de menores ganancias por venta, la pérdida de ingresos de Petroperú se da también ante los menores precios promedio de venta de combustibles derivados de la disminución del precio internacional del crudo y derivados”; así como los mayores costos de compra de hidrocarburos, ante la sobreestadía por la demora en la entrega de productos por parte de sus proveedores.

Según la compañía, la apreciación del dólar entre los meses de julio, agosto y septiembre también generó un impacto desfavorable en sus finanzas por la diferencia del tipo de cambio, ya que la firma cuenta con más activos que pasivos monetarios en soles.

El alza del precio internacional del crudo en este año 2022, derivado principalmente del conflicto entre Rusia y Ucrania, trae como consecuencia el alza en los servicios de transporte (fletes y vinculados), lo que eleva aún más los costos”, apuntó Petroperú en su informe.

En resumen, la empresa apuntó que la pérdida neta registrada a septiembre de este 2022 se da en una coyuntura de precios internacionales altos para los combustibles, mayores costos de transporte y costos totales de adquisición y con ello menores márgenes para Petroperú. A ello se suma que la firma está en etapa de asumir costos de inicio de producción y estabilización progresiva del proyecto de modernización de la Refinería de Talara; y que debió asumir “mayores gastos financieros por líneas de crédito restringidas y más caras e incremento del tipo de cambio”.

Esta situación se da en un contexto de reducción en la calificación de la deuda de Petroperú por parte de Fitch y tandard & Poor’s a lo largo del año, con lo cual la compañía peruana no cuenta con grado de inversión. Al haber mayor incertidumbre sobre la solvencia financiera de Petroperú, a la estatal se le cerraron líneas de crédito por no dar garantías de pago a sus proveedores.

La limitación en las líneas de crédito otorgadas por bancos a Petroperú tras la reducción en su calificación crediticia, que se dio luego de que la empresa se retrasara de manera irregular en la auditoría de sus estados financieros del 2021, implicó retrasos en el pago a proveedores, demora de entrega en productos como gasolina y diésel, mayores costos y menores márgenes para la estatal. Dicha complicación en el pago oportuno a sus proveedores desencadenó la retención de los productos que Petroperú requería en diversos puertos de la costa peruana, llevando a un desabastecimiento en algunos grifos del Perú en las últimas semanas.

Petroperú reconoció que se encuentra en una situación compleja, luego de que el gobierno peruano aprobara otorgarle capital de forma excepcional por US$1.000 millones así como una garantía de US$500 millones para solventar los gastos urgentes que tiene la empresa.

De acuerdo a Apoyo Consultoría, la inyección de capital del Gobierno en Petroperú fue necesaria para evitar los riesgos de suministro de combustible a corto plazo y reducir la probabilidad de nuevas rebajas en la calificación crediticia perono resuelve los problemas estructurales de largo plazo de la empresa causados por su débil gobernanza, su mala gestión y sus cuestionadas inversiones”.

Petroperú apuntó que el 27 de octubre se depositaron los primeros fondos de este salvataje financiero por la suma de 2.459 millones de soles. Asimismo, la compañía detalló que los US$750 millones que recibió en mayo de este año se han utilizado íntegramente para pago a proveedores.

REFINERÍA DE TALARA Y RIESGOS PARA PETROPERÚ

Según Petroperú, al mes de septiembre la modernización de la refinería de Talara presentó un avance integral del 97,8% con lo cual la empresa dio inicio a la etapa de producción “en forma progresiva”. La estatal prevé que en diciembre el proyecto en la refinería haya culminado, en tanto no hayan imprevistos para iniciar las operaciones.

Una vez culminada la entrada en producción total de todo el proyecto, se espera que los flujos de efectivo de las actividades de operación de la compañía le permitan incrementar sus márgenes de rentabilidad y mantener suficiente efectivo para atender sus obligaciones y revertir el actual capital de trabajo negativo en el mediano plazo”, comentó la firma.

La modernización de la refinería de Talara ha sido criticada desde que inició el proyecto, que en el camino ha sufrido una serie de retrasos y sobrecostos y que llevó a que Petroperú asuma una mayor deuda con agentes externos. A fines de julio de este año se actualizó el monto estimado de inversión para la refinería de Talara hasta US$5.290 millones (sin intereses operativos).

Gestión tras gestión, la junta de accionistas de Petroperú continuó con el proyecto que empezó el 2014 ya se encuentra en la recta final. Petroperú agregó en la presentación de sus resultados que los beneficios más relevantes que dará el proyecto“ de la refinería de Talara al país son la posibilidad de refinar crudos pesados, incrementar la capacidad de refino, mejorar la balanza comercial de hidrocarburos, reducir el riesgo de desabastecimiento de combustibles por producción propia, la sostenibilidad del negocio, mayores ingresos para el fisco, beneficio a empresas productoras, entre otros puntos.

Además, la compañía apuntó entre los riesgos relevantes aún presentes para sus finanzas la tendencia alcista que mantienen los precios internacionales del petróleo, ya que ello mantiene activo el mecanismo del Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (FEPC). Petroperú refirió que el FEPC no cancela en plazos cortos, lo que compromete su nivel de liquidez.

A ello sumó la “agresiva competencia en el mercado nacional” por nuevos importadores que cuentan con la posibilidad de otorgar mayores facilidades comerciales a los clientes.

PROBLEMAS DE LIQUIDEZ DE PETROPERÚ

Petroperú también explicó que hay hasta tres situaciones que en la actualidad le general problemas de liquidez. Entre estos se encuentran:

  • El Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (FEPC), mecanismo empleado por el Estado para mitigar el alza en el precio de la gasolina y diésel, ya que Petroperú no logra cobrar en plazos cortos para compensar la cobertura económica.
  • El Crédito fiscal del impuesto general a las ventas (IGV) que la empresa paga por la inversión en la refinería de Talara y por las ventas exoneradas en la selva de Perú, a raíz de la Ley de promoción de la inversión en la Amazonía.
  • La adquisición de stock de crudo para la puesta en marcha progresiva de la refinería de Talara, que constituye salida de efectivo para el recupero progresivo.

Petroperú representa cerca del 40% del mercado de diésel y el 50% del mercado de gasolinas en el Perú, y desde el segundo trimestre -tras la revisión a la baja de su calificación de deuda- la firma presentó problemas de abastecimiento por posibles impagos a sus proveedores que reflejaban el alto nivel de endeudamiento de la estatal y su baja liquidez. “Los proveedores decidieron esperar a que la empresa pagara sus líneas de crédito antes de completar la entrega de productos petroleros”, puntualizó Apoyo Consultoría en un informe.

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