Bloomberg — Argentina, que actualmente es el productor de litio de más rápido crecimiento en el mundo, dice que pronto podría obtener acceso al mercado de Estados Unidos.
El país viene presionando para participar en la campaña del presidente Joe Biden sobre vehículos eléctricos. La legislación, llamada Ley para la Reducción de la Inflación, incluye créditos fiscales para los vehículos que tienen una parte de los metales de sus baterías que proviene de EE.UU. o de un país con un tratado de libre comercio. Australia y Chile, los dos principales proveedores de litio, tienen un TLC con EE.UU., pero Argentina no.
Autoridades de Buenos Aires vienen trabajando en el tema con diplomáticos estadounidenses y creen que están cerca de obtener una exención para Argentina, dijeron el martes Fernanda Ávila, subsecretaria de Minería federal, y Franco Mignacco, presidente del principal grupo industrial Caem, en el marco de un evento en la capital argentina.
Así, el impulso de Argentina se produce en medio de un tira y afloja entre EE.UU. y China por minerales clave para los vehículos eléctricos.
Los únicos dos productores del país en este momento, Livent Corp. y Allkem Ltd., se fusionarán para convertirse en la tercera compañía de litio más grande del mundo enfocada en suministro para EE.UU.
Un tercer proyecto argentino está a punto de iniciar producción, pero la operación de Lithium Americas Corp. abastecerá a la empresa china Ganfeng Lithium Co. ya que Pekín promete, de manera más amplia, ayudar a Argentina a desarrollar una industria de procesamiento de litio.
Ese proyecto, que se separará de los activos estadounidenses de Lithium Americas, debería entrar en funcionamiento el próximo mes, dijo Mignacco.