¿Qué pasa con las obras en Colombia y por qué están afectando el PIB?

En el primer trimestre de 2023 la economía de Colombia creció 3% anual. De 12 actividades analizadas, solo una no despega: la construcción, la de obras viales

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Bogotá — La economía colombiana creció 3% en el primer trimestre de 2023. Aunque estuvo arriba de las expectativas del promedio de analistas consultados en una encuesta del BanRepública realizada en abril, el resultado es inferior al del mismo periodo de 2022 (8,2%), lo cual demuestra que la actividad productiva se está enfriando.

De 12 actividades analizadas en el Producto Interno Bruto (PIB) trimestral de Colombia, solo una continúa rezagada: la construcción, principalmente, la de carreteras y vías de ferrocarril, de proyectos de servicio público y de otras bras de ingeniería civil. Esta rama cayó 14,9% anual en el primer trimestre de 2023, según el Dane.

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¿Qué pasa con las obras en Colombia y por qué están afectando el PIB?

En palabras de Julio Romero, economista jefe de Corficolombiana, el mal desempeño de la construcción de obras civiles en el primer trimestre profundizó la senda negativa que viene registrando el sector desde hace varios trimestres.

Lo anterior es “resultado de la menor ejecución de proyectos viales 4G (debido a que varios ya están avanzados o fueron entregados previamente) y la lenta dinámica de las obras públicas. Proyectos como el metro de Bogotá, aún están en fases tempranas y su avance no compensa el pobre dinamismo de los otros rubros”, agregó Romero.

De acuerdo con Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank, “es un tema de varias cosas. Entre estos, los costos de producción han estado altos y buena parte de los insumos son importados. Su dinamismo se ha demorado porque la tasa de cambio no ayuda y la ejecución ha sido lenta. Hacia el futuro pensamos que las obras civiles regionales van a acelerarse un poco, después de la segunda mitad del año, pues normalmente cuando hay elecciones eso sucede”.

Para David Cubides, director de investigaciones económicas de Alianza Valores, el bajo desempeño del renglón de obras civiles, también “puede tener que ver con un presupuesto o gasto de ejecución más bajo en los proyectos de infraestructura. Esto tiene que ver también con procesos políticos, pues en medio de estos cambios de gobierno la ejecución presupuestal se afecta”.

“Llama la atención que siendo este el último año de alcaldes y gobernadores no se haya acelerado la ejecución de los presupuestos de inversión y que el PIB de este ramo, tan dependiente de la capacidad de ejecución de los gobernantes locales, haya acelerado su caída al inicio del último año de mandato”, mencionó Mauricio Hernández, economista de Bbva Research.

El experto del Bbva agregó que “en un momento de desaceleración económica es necesario que el gasto público se ejecute con rapidez y eficiencia, pues esto ayudará a compensar los efectos negativos sobre el empleo y la dinámica general de la economía”.

Por su parte, Juan Camilo Pardo, analista de Corficolombiana, explicó que aunque el sector de obras de infraestuctura se ha desacelerado porque el avance promedio de las 4G es alto, “esta no necesariamente es una mala noticia porque tiene réditos, no en el PIB sino en el encadenamiento en otros sectores: la generación de empleo, el ahorro en tiempo y en costos, en desplazamientos, la conexión entre zonas de consumo y distribución. Estos efectos no se ven ahora en el PIB, sino en temas de competitividad del país”.

Pardo también dijo que “en unos meses debido a un contexto internacional de desaceleración de las materias primas como acero, chatarra, hierro, carbón, se espera que los costos empiecen a desaclerarse de manera importante, pero eso implica que se aplacen las decisiones de inversión en los proyectos de infraestructura. Lo que muestran los datos es que cuando los costos crecen a un ritmo elevado, la ejecución en los proyectos es inferior y es precisamente lo que estamos viendo hoy en día”.

Según Sergio Segura, analista experto en temas de construcción, “las obras civiles en Colombia están afrontando un reto en su cierre financiero, es decir, en la consecución de los montos mínimos de deuda para el proyecto con entidades financieras. El costo de financiamiento está generando que las compañías evalúen de nuevo la viabilidad financiera de los proyectos. Además, la inflación tuvo impactos en el costo de los insumos de la construcción y el incremento en el costo del personal”.

Por último Pardo, el experto de Corficolombiana, mencionó que “dada la alta base estadística y las exigencias que deberían haber en los crecimientos secuenciales durante los siguientes trimestres, es posible que el sector de obras civiles se vuelva a contraer respecto al año pasado, teniendo en cuenta que en los últimos 3 años se ha venido contrayendo de forma consecutiva”.