Bloomberg — El oro subió a un máximo histórico, con el aumento de las tensiones geopolíticas y las apuestas a más recortes de tasas de la Reserva Federal añadiendo ímpetu al mejor rendimiento anual en más de cuatro décadas.
El metal precioso subió más de un 1% para superar el récord anterior de US$4.381 la onza establecido en octubre. Los operadores apuestan a que la Fed recortará las tasas de interés dos veces en 2026, después de que una serie de datos económicos de la semana pasada no contribuyeran a aclarar las perspectivas, aunque el presidente estadounidense, Donald Trump, ha abogado por una bajada agresiva de las tasas.
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Una política monetaria más laxa es un viento de cola para el oro y la plata, que no pagan intereses.
Las tensiones geopolíticas que han aumentado en las últimas semanas también han potenciado el atractivo refugio del oro y la plata. EE.UU. ha intensificado un bloqueo petrolero contra Venezuela, aumentando la presión sobre el gobierno del presidente Nicolás Maduro, mientras que Ucrania atacó por primera vez un petrolero de la flota sombra rusa en el mar Mediterráneo.
Los dos metales preciosos se encaminan hacia sus mayores ganancias anuales desde 1979. El oro ha subido cerca de dos tercios, apuntalado por el aumento de las compras de los bancos centrales y las entradas en fondos cotizados respaldados por lingotes. Los ETF respaldados por oro han visto aumentar las entradas durante cinco semanas consecutivas, según datos recopilados por Bloomberg, y las cifras del Consejo Mundial del Oro muestran que las tenencias totales en estos fondos han aumentado todos los meses de este año, excepto mayo.
El oro ha rebotado rápidamente tras un retroceso desde su máximo en octubre, cuando el rally se consideró sobrecalentado. Goldman Sachs Group Inc. (GS) se encuentra entre varios bancos que predicen que los precios seguirán subiendo en 2026, emitiendo un escenario base de US$4.900 la onza con riesgos al alza. Los inversores en ETF, dijo, están empezando a competir con los bancos centrales por la limitada oferta física.
“Las compras de los bancos centrales, la demanda física y las coberturas geopolíticas siguen siendo anclas a medio y largo plazo, mientras que la política de la Fed y las tasas reales siguen impulsando las oscilaciones cíclicas”, dijo Dilin Wu, estratega de Pepperstone Group Ltd., en una nota. “Los nuevos participantes, como los emisores de stablecoins como Tether y ciertos departamentos de tesorería de empresas, están empezando a asignar al oro. Esta base de capital más amplia añade resistencia a la demanda”.
La plata avanzó hasta un 2,7% hasta un récord de US$68,9883 la onza, impulsada por las entradas especulativas y las persistentes dislocaciones de la oferta en los principales centros de negociación tras una histórica compresión de posiciones cortas en octubre. El volumen total de negociación de los futuros de la plata en Shanghai se disparó a principios de mes hasta niveles cercanos a los registrados durante la crisis de hace un par de meses.
El platino avanzó por octava sesión consecutiva para cotizar por encima de los US$2.000 la onza por primera vez desde 2008.
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El metal, que se ha revalorizado alrededor de un 125% este año, ha subido con mayor rapidez en los últimos días, ya que el mercado londinense muestra signos de estrechamiento. Los bancos están aparcando más metal en EE.UU. para asegurarse contra el riesgo de aranceles, mientras que las exportaciones a China han sido sólidas a medida que crece la demanda y comienzan a negociarse contratos en la Bolsa de Futuros de Guangzhou.
El oro al contado subió un 1,1% hasta los US$4.386,32 la onza a las 10.57 horas en Singapur. La plata avanzó un 2,6% hasta los US$68,87. El platino subió un 3,9% y el paladio un 4,5%. El índice Bloomberg del dólar al contado cayó un 0,1%.
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