Bloomberg — El presidente Donald Trump dijo que va a nominar al gobernador de Luisiana, Jeff Landry, como enviado especial de EE.UU. a Groenlandia, en la última señal de que el presidente mantiene sus planes de aumentar la influencia de EE.UU. sobre la isla que ha sugerido que quiere comprar.
“Jeff entiende lo esencial que es Groenlandia para nuestra Seguridad Nacional, y promoverá firmemente los intereses de nuestro país para la seguridad, la protección y la supervivencia de nuestros aliados y, de hecho, del mundo”, dijo Trump en una publicación en las redes sociales el domingo por la noche.
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El puesto sería nuevo para EE.UU., que tiene un embajador en Dinamarca. Groenlandia es un territorio autónomo dependiente de Dinamarca con autogobierno y su propio parlamento.
No está claro cómo se solaparía el cargo con la función actual de Landry, ya que el republicano se acerca al final de su primer año como gobernador de Luisiana. Landry, antiguo agente de policía, representante en el Congreso y fiscal general del estado, ha pasado la mayor parte de su carrera centrado en la política nacional. Su mandato como gobernador finaliza en enero de 2028.
Trump ha mostrado un gran interés en hacerse con el control de Groenlandia, después de haber dejado flotar por primera vez la idea de comprar el territorio autónomo a Dinamarca hace seis años.
Pero Trump se ha vuelto más vocal al respecto en su segundo mandato, y ha enviado a la isla ártica a funcionarios estadounidenses clave, como el vicepresidente JD Vance y el secretario de Energía Chris Wright. Donald Trump Jr., el hijo del presidente, también visitó Groenlandia en enero, antes de que Trump jurara su segundo mandato.
El atractivo de Groenlandia para Trump radica en su situación estratégica a caballo entre los océanos Atlántico Norte y Ártico, aguas cada vez más accesibles debido al cambio climático. La isla ya alberga la base aérea más septentrional de EE.UU. y una estación de radar utilizada para detectar amenazas de misiles.
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Se esperaba que altos funcionarios de EE.UU., Dinamarca y Groenlandia se reunieran este mes para discutir la cooperación militar y civil.
El enfoque de Trump ha sido observado con recelo por los residentes de Groenlandia y Dinamarca, y ha atraído el escrutinio de los funcionarios de inteligencia daneses. El Servicio de Inteligencia de Defensa danés describió por primera vez a principios de este mes a EE.UU. como un riesgo potencial para la seguridad, señalando los esfuerzos de EE.UU. para esgrimir sus fortalezas económicas y tecnológicas como una herramienta de poder ante amigos y enemigos.
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