Bloomberg — El martes fue atacado un cuarto petrolero vinculado a Rusia en menos de una semana, lo que supone un fuerte aumento de los ataques contra buques asociados a Moscú, ahora que la guerra en Ucrania se acerca a su quinto año.
El pequeño petrolero Midvolga-2, que transportaba aceite de girasol, navegaba por el mar Negro desde Rusia hacia Georgia cuando fue atacado a unas 80 millas de la costa norte de Turquía, según informó la Dirección de Asuntos Marítimos del Ministerio de Transporte el día X.
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El barco fue alcanzado el martes por la mañana por drones, según funcionarios turcos familiarizados con el asunto, que hablaron bajo condición de anonimato.
Rusia y Ucrania están librando una guerra energética cada vez más intensa, en un intento por obtener una ventaja significativa tras meses de estancamiento en el frente y ante la posibilidad de nuevas conversaciones de paz.
La semana pasada se produjo un aumento espectacular de la intensidad de los ataques, con cuatro incidentes, lo que eleva el recuento desde diciembre a al menos nueve.
En general, nadie ha asumido la responsabilidad de los incidentes, aunque una persona con conocimiento del asunto dijo que Ucrania estaba detrás de dos ataques que tuvieron lugar en el mar Negro el viernes. Un buque gestionado por Turquía también sufrió cuatro explosiones externas cerca de Senegal.
El ataque del martes se produjo a pesar de las críticas del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, quien afirmó que estos incidentes “alarmante” están amenazando la seguridad y la navegación en las aguas de su país.
El Midvolga-2, que navega bajo bandera rusa, no ha solicitado ayuda y sus 13 tripulantes se encuentran ilesos, según informó el Ministerio de Transporte de Turquía, que añadió que el buque navega por sus propios medios hacia el puerto turco de Sinop.
El propietario, que figura como Mazk Management, con sede en Moscú, en la base de datos marítima Equasis, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Además de los ataques a buques, Ucrania ha atacado un número récord de refinerías de petróleo rusas y ha causado importantes daños a un puerto petrolero en el mar Negro ruso que maneja petróleo de Kazajistán.
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El enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff, liderará una delegación a Rusia para mantener conversaciones esta semana sobre la última propuesta para poner fin a la guerra en Ucrania.
Turquía ha intentado posicionarse como mediador neutral en el conflicto, acogiendo conversaciones de paz en Estambul mientras vende armas a Kiev e importa petróleo ruso rechazado por sus aliados de la OTAN. Más recientemente, Turquía ha comenzado a reducir las compras de crudo bajo la creciente presión de Estados Unidos.
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