Bloomberg — El insaciable apetito de la inteligencia artificial por el almacenamiento de datos ha proporcionado al fabricante japonés de chips de memoria Kioxia Holdings Corp. unas ganancias bursátiles mundiales este año, una señal de que el auge de la IA está vivo y coleando a pesar de los recientes nervios del mercado.
Las acciones de Kioxia han subido alrededor de un 540% en lo que va de año, superando a todos los demás miembros del índice MSCI World y convirtiéndose en la acción más alta del índice de referencia japonés Topix para 2025. El fabricante de memorias flash NAND, que no debutó en la Bolsa de Tokio hasta el pasado mes de diciembre, cuenta con Apple Inc. (AAPL) y Microsoft Corp. (MSFT) entre sus clientes y su valor actual ronda los 5,7 billones de yenes (US$36.000 millones).
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La estratosférica escalada de Kioxia ilustra el auge de la demanda de memoria por parte de la industria tecnológica a medida que los hiperescaladores se apresuran a construir infraestructuras de IA. Los chips como el de Kioxia son esenciales para el entrenamiento en IA y los centros de datos. Este año, las principales empresas tecnológicas advirtieron de una escasez de suministro de memoria en medio de una demanda disparada, y los analistas pronosticaron un aumento de los precios.
La fiebre de la memoria ha sido una bendición para las acciones de Kioxia, ya que los inversores prevén que la sólida demanda y el aumento de los precios impulsarán sus ingresos. “En tecnología, entramos en 2026 principalmente orientados a la memoria, ya sea por exposición directa a Kioxia o por segundas jugadas derivadas”, dijo Amir Anvarzadeh, estratega de renta variable japonesa de Asymmetric Advisors Pte. Los fabricantes de obleas de chips como Sumco Corp. también se beneficiarán de la fuerte demanda de memoria el próximo año, afirmó.
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Aun así, el rendimiento de la acción ha suscitado cierta preocupación por la sobrevaloración, que también ha pesado sobre otras acciones relacionadas con la IA en los últimos meses. Kioxia cayó un 23% en un día después de que sus beneficios trimestrales no alcanzaran las elevadas expectativas de los inversores en noviembre.
Sin embargo, con una demanda de memoria que sigue superando con creces la oferta, Kioxia parece bien situada para capear los nervios del mercado de la IA en 2026, afirmó Anvarzadeh. “Las preocupaciones sobre una ralentización de la inversión en centros de datos no deberían afectar realmente a los precios de la memoria para el próximo plazo, puesto que el mercado ya está muy desabastecido”, afirmó.
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