BanRepública no descarta que en 2023 la economía colombiana caiga a números rojos

El equipo técnico del Emisor ajustó sus proyecciones al alza para 2022, pero el 2023 luce mucho menos optimista. La economía podría crecer entre -2% y 3,8%

BanRepublica no descarta que en 2023 la economía colombiana caiga a números rojos
03 de agosto, 2022 | 05:05 PM

Bogotá — Aunque con bombos y platillos se afirma que Colombia será de las economías que liderarán en crecimiento económico en 2022, lo cierto es que la gasolina no sería suficiente para mantener dicha tendencia en 2023, al menos así lo creen varios expertos entre los cuales está el equipo técnico del Banco de la República.

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En la presentación del informe de política monetaria de julio el gerente técnico del Emisor, Hernando Vargas, dijo este miércoles que aunque se revisó al alza la proyección de crecimiento de 2022 pasando del 5% al 6,9%, para 2023 la revisión fue a la baja, pasando de 2,9% a 1,1%. Sin embargo, para el próximo año el rango de crecimiento estaría entre -2% y 3,8%.

De acuerdo con Vargas, “el pronóstico de crecimiento para 2023 recoge los efectos de una mayor base de comparación en 2022, el ajuste del consumo, condiciones externas menos favorables y un impulso de la inversión aún en niveles menores que los de la prepandemia”.

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Tanto la proyección económica para 2022 como la de 2023 supone que la buena dinámica de la demanda interna es transitoria y que el consumo total se desacelerará. Además, dijo el directivo del Banrep, se incluyen crecimientos intertrimestrales bajos en la segunda mitad de 2022 y la primera parte de 2023.

“En 2023 el crecimiento estaría impulsado por la inversión, especialmente en obras civiles y construcción que vienen rezagadas. Sin embargo sería bajo por: base de comparación de alto crecimiento en 2022, agotamiento de demanda represada, ahorro y crédito, desaceleración mundial, condiciones financieras extremas apretadas y el ajuste de la política monetaria”, añadió Vargas.

De otro lado, el directivo dijo que las expectativas de inflación también se revisaron al alza, tanto para 2022 como para 2023. Así las cosas, a finales de 2022 y 2023 el indicador se situaría en 9,7% y 5,7% respectivamente. En el informe de política monetaria de abril se proyectaba una estimación más baja de 7,1% y 4,8% para 2022 y 2023.

Entre los factores que explican la revisión del pronóstico Vargas mencionó la materialización de choques de oferta, mayores y más persistentes excesos de demanda, mayores presiones de la tasa de cambio y mayores precios internos de los combustibles.

“La inflación empezaría a descender en el cuarto trimestre de 2022 por la dilución de los choques de oferta, especialmente para los precios de los alimentos”