Bogotá — “Aquí, como en todos los puertos y aeropuertos del país el tema complicado es la cocaína”, dice Domingo Chinea, presidente de la Sociedad Portuaria de Santa Marta, mientras explica cómo han tenido que sofisticar sus equipos y protocolos para contribuir con la Policía Antinarcóticos en la lucha contra las drogas.
Y explica que ese es principal problema porque “la producción está en niveles históricos y cómo ha aumentado tanto la exportación licita se está montando sobre esas ventas al exterior para contaminar las cargas”, dice Chinea, quien, además, cuenta que el 100% de los contenedores d exportación que salen desde el puerto es escaneado.
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La información que surge de dicho proceso de escaneo es revisada por la Policía Antinarcóticos, tanto de Santa Marta, como de Bogotá. “La policía está trabajando muy duro, pero es tanta la carga que es un trabajo agotador”, asegura el presidente del puerto.
Asegura que es gracias a ese trabajo conjunto que se han producido las grandes incautaciones de droga tanto en el puerto como en el exterior durante este año. “Las imágenes escaneadas tú las puedes revisar, aunque el buque ya esté navegando y si se detecta cualquier cosa extraña se les da aviso a las autoridades europeas para que ellas allá se encarguen de revisar”, sostiene.
No cesaron en pandemia
La lucha contra el narcotráfico obligó a las autoridades a seguir alerta durante los meses más complejos de la pandemia. “Los únicos que siguieron muy activos pre, pos y durante la pandemia fueron los narcos. Ellos van cambiando la forma cómo lo hacen, pero nunca dejan intentar mandar la droga”, aseguró Chinea.
“Ellos van cambiando la forma de los tipos de exportación. Meten la coca en los equipos más sofisticados, la meten en la mezcla, hoy hay mucha tecnología para mezclarla con cargas insólitas, dese carbón vegetal hasta harinas y muchos productos”, dice el presidente del puerto.
Asegura también que los narcos han reclutado en sus filas a grandes talentos porque “no es solo mandar la droga, eso posteriormente requiere un proceso químico de decantación para, por ejemplo, separar el carbón de la coca. Esos son procesos de alta tecnología y muy complejos. Hemos descubierto que lo hacen con todo tipo de mercancía, incluso, con mineral de cobre”, cuenta el presidente de la sociedad portuaria.
Pero asegura que hay narcos con todo tipo de métodos, “van desde métodos de siempre, como puede ser contaminar la carga y poner las panelas de droga dentro de la carga. Acá hemos visto cocaína de todos los tipos, líquida, en polvo, camuflada. Eso nos ha obligado a nosotros y a las policías antinarcóticos del mundo a ir evolucionando a nuevas formas de detección porque ellos intentan mandar la droga en la estructura del contenedor, en la carga, en los cartones en los que empacan la carga, les impregnan la droga, ellos usan millones de fórmulas para despistar y las autoridades deben siempre ir un paso adelante”, dice Chinea.
Narcos disfrazados de niños
Uno de los mecanismos que les permite a las autoridades anticiparse a los narcotraficantes respecto de cómo van a enviar la mercancía o por qué puerto van a intentar sacarla es a través de interceptar comunicaciones.
Eso también lo saben los narcos y es por ello que han encontrado en Internet un aliado único para pasar desapercibidos ante los responsables de la lucha contra las drogas.
“Ellos se han ido volviendo cada vez más sofisticados para comunicarse. Usan la Internet, los juegos en línea que principalmente juegan niños y hasta las aplicaciones de citas, de todo tipo de herramienta para que no parezca que son lo que son. Han ido evolucionando junto con la tecnología para hacer las operaciones de narcotráfico y lavado lo más sofisticadas posible”, contó Chinea.
Tecnología, sí o sí
Chinea asegura que la labor de la policía colombiana, así como la cooperación con las oficinas policiales de otros lugares del mundo ha sido clave para detectar a los narcos, incluso, resalta que es la Policía colombiana la que está capacitando a otras en el mundo por su experiencia de décadas en la lucha contra las drogas.
Sin embargo, asegura que para poder ganar la guerra a los narcos se requiere sí o sí, tener la tecnología como aliado.
“Hay que tener todo sistematizado. Aquí no hay procesos manuales. No intervienen las personas, y además, el 100% de la carga es escaneada, y toda la información de los contenedores, es decir, las imágenes de los contenedores están en línea con las autoridades. Ellos tienen las imágenes desde antes de que se exporte”, dice Domingo Chinea quien recuerda que es así como han logrado dar grandes golpes a las mafias.
No obstante, dice que “falta un buen software de perfilamiento de la carga. Es decir, tener una matriz de variables para que sea el mismo software el que determine cuál es un contenedor de alto riesgo y cuál de bajo riesgo”, explica.
Con el perfilamiento, Chinea dice que sería posible identificar más rápida y certeramente aquellos contenedores que, por ejemplo, le pertenecen a una empresa exportadora que nunca antes había exportado. Ese, dice, sería clasificado como un contenedor de alto riesgo.
“Es un tipo de empresa que lanza una alerta, pero no la única. Determinado tipo de productos hacia determinado tipo de destinos también se constituyen en una alerta”, agrega. “Acá tuvimos, por da un ejemplo, un caso de exportación de pulpa de uva hacia el país que más exporta pulpa de uva en el mundo. Esas son cosas que no tienen presentación”.
Así mismo, dice que otro tipo de alertas son exportaciones de productos que no están consumibles en determinados países, o una exportación de productos que ya exporta una multinacional o una empresa con mucho recorrido. “Las matrices las elaboran los expertos y pueden tener muchas variables: revisan la empresa, el origen de la carga, el destino, el transportista, quién la compra, quién la vende, hacia qué mercado va, si ese mercado realmente tiene demanda por ese producto, en fin, hay muchas variables por revisar”.
Blindar el comercio exterior
Explica Chinea que toda la labor de aprehensión de mercancía está a cargo de la Policía y que la misión del muerto se limita en entregar las herramientas para esa labor.
“Nuestra misión es blindar el comercio exterior porque es preferible coger la droga aquí y no en el puerto de destino porque dañan la imagen del comercio exterior y del país”, dice.
Viajes de 1.000 kilómetros
Aunque el puerto de Santa Marta es el que debe evitar que la droga salga de Colombia con destino a otros países de Europa, Chinea se pregunta cómo hace la cocaína para llegar hasta el puerto si no es producida en el Magdalena.
“Ni en el departamento del Magdalena, ni en los que están cerca se produce coca. O sea, aquí la coca llega de los departamentos de Nariño, Putumayo, Cauca o Norte de Santander. Es decir, viaja cientos de kilómetros para llegar aquí. ¿Cómo y por qué?”, dice el ejecutivo del puerto.