Bloomberg — Los responsables del Banco de Japón están dispuestos a subir las tasas de interés en una reunión de política monetaria que se celebrará a finales de este mes, siempre y cuando no se produzca entretanto ninguna conmoción importante en la economía o en los mercados financieros, según personas familiarizadas con el asunto.
El banco central también indicará que seguirá subiendo las tasas si se cumplen sus perspectivas económicas, al tiempo que se mantendrá cauto sobre hasta qué punto acabarán subiendo las tasas, dijeron estas personas.
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Los funcionarios ven una alta probabilidad de aumentar la tasa de referencia en un cuarto de punto porcentual hasta el 0,75% al final de una reunión de dos días el 19 de diciembre, dijeron las personas. Una subida de tasas elevaría la tasa de interés oficial en Japón a su nivel más alto desde 1995. Uno de los principales focos de atención del mercado es la agresividad con la que el banco central apuntará subidas adicionales.
El yen se fortaleció frente al dólar tras el informe, y cotizaba en torno a 154,56 a media tarde en Tokio, desde justo por encima de 155 antes de la noticia.
Las expectativas entre los agentes del mercado de una inminente subida de tasas se dispararon esta semana después de que el gobernador Kazuo Ueda dijera que su consejo tomaría una decisión adecuada sobre la subida de las tasas de interés en un discurso pronunciado el lunes. Es un mensaje similar al que dio en enero antes de una medida para elevar los costes de endeudamiento.
Los funcionarios del BOJ eran conscientes de cómo interpretarían el mercado sus comentarios, según estas personas, un indicio de que los inversores han sacado la conclusión correcta. Un índice de swaps a un día muestra que los operadores ven alrededor de un 90% de posibilidades de que se produzca la medida este mes.
Miembros clave del gobierno de la primera ministra Sanae Takaichi no se interpondrían en el camino del Banco de Japón si decide subir las tasas de interés en diciembre, según dijeron a Bloomberg a principios de esta semana personas familiarizadas con el asunto. Takaichi es conocida como partidaria de la relajación monetaria y los observadores del BOJ han citado su postura como clave para influir en la senda de tasas del BOJ.
Con una mayor claridad sobre el impacto de los aranceles estadounidenses y unos elevados beneficios corporativos que siguen dando a las empresas margen para subir los salarios, los funcionarios consideran que ha aumentado la probabilidad de que se cumplan sus perspectivas económicas, dijeron estas personas.
Aún así, el banco continuará tamizando los datos y la información entrantes hasta el último minuto antes de llegar a una decisión política final, dijeron las personas. La Reserva Federal se reúne la próxima semana y se espera que recorte su tasa de interés de referencia. Su decisión, combinada con cualquier señal sobre las perspectivas de las tasas estadounidenses, puede influir en los mercados y en el yen.
La semana siguiente, el Banco de Japón publicará su encuesta empresarial trimestral Tankan, uno de sus informes económicos más seguidos, pocos días antes de la reunión de política monetaria.
Los funcionarios ven una subida de tasas como un ajuste de la relajación monetaria, no un endurecimiento, dado que las condiciones financieras seguirán siendo favorables para la economía con la tasa de interés real aún por debajo de cero, según la gente. Eso es un indicio de que la tasa de interés no ha alcanzado un nivel neutro en el que ni estimula ni enfría la economía.
La estimación del Banco de Japón para la tasa neutral se sitúa en un amplio rango entre el 1% y el 2,5%. Los funcionarios creen que es difícil precisar el nivel o estrechar el rango, según las personas.
Por lo tanto, es probable que el banco central sugiera la necesidad de examinar cómo responde la economía a cada subida para determinar hasta dónde subir las tasas, según las personas.
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El Banco de Japón ha mantenido sus tasas sin cambios desde enero, ya que ha tratado de evaluar si la inflación subyacente aumentará como se espera, incluso mientras la economía se ve afectada por el aumento de los aranceles estadounidenses.
La economía se contrajo durante el verano, pero se espera que haya vuelto a crecer este trimestre. El reciente paquete económico de Takaichi, la mayor ronda de nuevas medidas de gasto desde la relajación de las restricciones por la pandemia, ofrecerá apoyo a los hogares y a la economía en los próximos meses.
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