Bloomberg — La producción de cocaína en Colombia alcanzó un récord el año pasado. La droga inundó nuevos mercados e intensificó la violencia en todo el planeta.
Fotos de satélite muestran que la cantidad de tierra sembrada con coca, la materia prima para fabricar la droga, aumentó a 230.000 hectáreas en 2022, un 13% más que el año previo.
Eso es suficiente para producir 1.700 toneladas de cocaína refinada, la mayor cantidad jamás alcanzada, según un informe publicado el lunes por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
El exceso de oferta ha provocado un aumento de la pureza en Europa y Estados Unidos, y un aumento de las incautaciones en todas partes, desde África hasta Asia y Europa del Este. Además, ha convertido a Ecuador, que alguna vez fue pacífico, en uno de los países más violentos del mundo, mientras los cárteles luchan por el control de puertos y rutas.
Gustavo Petro, que asumió el poder como presidente de Colombia en agosto pasado, decía que la guerra contra las drogas emprendida por Washington y Bogotá durante décadas había fracasado y prometía un nuevo enfoque. Actualmente, su Gobierno busca conversaciones con los principales grupos narcotraficantes del país, con la esperanza de poner fin a seis décadas de conflicto civil mediante acuerdos de paz.