:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/SWX5VHXTG5AJJJ4ZCN5S3G7E4I.jpg "Una taza de café en una fotografía del martes 1 de agosto de 2017.")
Bogotá — En medio de las discusiones en el país por la reforma tributaria, los cafeteros han expuesto sus principales preocupaciones de cara a los cambios que podrían darse afectando su actividad, por lo que le han pedido al Gobierno del presidente Gustavo Petro revisar cuatro aspectos puntuales.
El Comité Directivo de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia (FNC), conformado por representantes de los productores de grano de todo el país, puso sobre la mesa los retos que existen para cumplir de “manera eficiente y racional las obligaciones fiscales”.
Entre los desafíos nombró rezagos en vías de acceso, conectividad, servicios financieros y protección social.
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La actividad cafetera se encuentra en un momento coyuntural, pues los precios internos que han llegado a niveles récord este año han contrastado con una alta inflación que está impactando a esos productos y una baja de la producción por cuenta de las condiciones climáticas.
Solo en julio la producción de café verde en Colombia llegó a los 944.000 sacos de 60 kg, lo que representó una importante caída del 22% frente a los más de 1,2 millones producidos en el mismo mes de 2021, según la Federación Nacional de Cafeteros (FNC).
En julio pasado las exportaciones se desplomaron un 14% y se ubicaron en el millón de sacos de 60 kg de café verde.
Entre los puntos que piden revisar los cafeteros destaca la eliminación del costo presunto de la mano de obra.
Los productores creen que derogar la norma que permite deducir el costo presunto de la mano de obra “impactaría los ingresos de los caficultores al elevar su tributación”.
Según indicaron, en la actualidad el costo presunto, para efectos del impuesto de renta y complementarios, es de un 40%.
La FNC indica que el componente de mano de obra en la caficultura alcanza en realidad 60,7%, mientras que los insumos un 32,7% y la administración y gastos generales un 7,1%.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/KNDZ2FO3TFH7LPSAL55UI66YIE.jpg "Un trabajador recoge cerezas de café durante una cosecha en Fredonia, departamento de Antioquia, Colombia.")
En este sentido, indica que “eliminar esta posibilidad volvería gravables ingresos que en la práctica hoy no lo son”.
Los cafeteros también piden una mirada tributaria diferenciada al campo colombiano y han manifestado que se le debe eximir de algunas obligaciones como la facturación electrónica.
Esto va en línea con la baja cobertura digital en dichos territorios, así como los retos formativos que existen en el manejo de las tecnologías de la información y las comunicaciones entre los productores.
Desde el sector también siguen con atención la propuesta referente a los impuestos a los alimentos y bebidas ultraprocesadas.
Para los cafeteros, si bien en la actualidad se busca estimular el consumo interno, este se podría ver afectado en caso de que se incluya al café soluble liofilizado y el extracto de café dentro de este impuestos.
“Tanto el café soluble como el extracto de café son productos de un solo ingrediente, por lo que se consideran alimentos mínimamente procesados. Resultaría un mensaje contrario a la realidad”, indicó.
Y en última instancia le piden al Gobierno del presidente Gustavo Petro que “considere expedir una disposición tributaria que permita que los incentivos y apoyos económicos que reciben los productores se consideren como ingresos no constitutivos de renta”.
En este sentido argumenta que “si bien hoy los programas tienen como propósito favorecer al sector rural mediante el desembolso de recursos, en la medida en que hoy no existe una disposición en el Estatuto Tributario que otorgue a tales beneficios el carácter de no gravado (excluyendo el caso de AIS), los beneficiarios de dichos programas han debido tributar sobre tales sumas, lo que en consecuencia reduce el margen neto recibido”.
Además, han argumentado que “cuando dichos recursos son desembolsados a través del sistema financiero, también ya están sometidos al gravamen a los movimientos financieros (4x1000), lo que en consecuencia reduce aún más el beneficio neto para el agricultor”.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/KNDZ2FO3TFH7LPSAL55UI66YIE.jpg "Café de Colombia se resiente y la producción se desploma un 22% en julio")
