Ciudad de México — El Gobierno mexicano y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) lanzaron un esquema de financiamiento para impulsar la relocalización de empresas insertas en las cadenas globales de valor o nearshoring en el país, pero principalmente en el sur y sureste donde se construye el Corredor Interoceánico Istmo de Tehuantepec y el Tren Maya.
Los recursos del paquete de financiamiento se canalizarán a través de Nacional Financiera (Nafin), un banco de desarrollo, con una línea de crédito inicial del BID de US$200 millones y tres millones de dólares de recursos no rembolsables que potenciarán los activos con los que cuenta la institución.
El esquema de financiamiento, en el que participaron la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Nafin, la Secretaría de Economía y el BID, busca atraer mayor inversión privada en la región sur y sureste del país como parte de la reubicación de empresas a esa zona del país que es prioridad para el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El financiamiento está diseñado para las empresas que se muden al istmo y se podrá acceder a los recursos con el BID a través de la Secretaría de Economía. El paquete de financiamiento tiene un perfil sustentable para incentivar y facilitar la relocalización de las empresas en cualquier parte del país, dando prioridad a la zona del Corredor Interoceánico.
Además, se contemplan incentivos fiscales en las actividades comerciales que se realicen en esa zona y en los impuestos de ISR e IVA, a fin de acelerar la inversión en el Corredor.
Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, dijo que esa región puede ser receptora de inversión, por lo que el Gobierno mexicano se encuentra en la implementación del Corredor del Istmo que será un enclave logístico que tendrá como pilares 10 polos industriales de desarrollo que se instalarán en el istmo a partir de 2023.
Dijo que el Corredor estará conectado a través de los puertos de Coatzacoalcos en Veracruz y Salina Cruz en Oaxaca, y las inversiones estarán enfocadas en incrementar la conectividad y transporte logístico mediante la modernización de puertos, vías férreas y carreteras a través de una red interconectada que refuerce servicios de seguridad nacional.
“Esta región del sureste podrá ser receptora de la potencial inversión señalada en estudios del BID, lo que se busca es reubicar cadenas de valor hacia Norteamérica. Será un polo de desarrollo para la región, será un polo logístico para los estados y países aledaños”
Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda
Yorio indicó que se estima que el desarrollo de los 10 polos industriales establecidos a lo largo del Corredor producirá una inversión de US$9.200 millones y generarán alrededor de 150.000 empleos en los estados de la zona.
Richard Martinez, vicepresidente de países del BID, dijo que un estudio elaborado por el banco estima que la ganancia potencial en el corto y mediano plazo de México por la reubicación de empresas es de US$35.000 millones, equivalente a 2,6% del PIB, derivado de nuevas exportaciones de mercancías.
Ese estudio arrojó que, además, México tiene el potencial más alto de la región para beneficiarse de esta coyuntura de nearshoring.
Señaló que el país ha mostrado capacidad para incorporarse de manera efectiva en cadenas globales de valor en los sectores automotriz, aeroespacial, dispositivos médicos, o eléctrico, principalmente.
“Estamos determinando con Hacienda y la Secretaría de Economía oportunidades en la cadena de semiconductores, sin embargo, los beneficios de esta estrategia no se han extendido a todas las regiones del país”, refirió Martínez.
Te puede interesar: