Bloomberg — El petróleo bajó mientras los inversores evaluaban las perspectivas de la demanda y una serie de detalles sobre el plan liderado por EE.UU. para limitar el precio del crudo ruso.
El West Texas Intermediate se acercó a los 86 dólares por barril en las primeras operaciones asiáticas, tras la volatilidad de la semana pasada, en la que los precios oscilaron en un amplio arco hasta acabar sin cambios. Los operadores están preocupados por el debilitamiento de la demanda a medida que el crecimiento mundial se ralentiza y China mantiene su intento de controlar la Covid-19 frenando la actividad.
En Estados Unidos, a última hora del viernes, el Tesoro publicó unas directrices de cumplimiento para el límite propuesto para el petróleo ruso, centrándose en la documentación necesaria para que el sector privado se adhiera al programa, que está previsto que entre en vigor a partir de diciembre a medida que Europa endurezca las sanciones sobre los flujos. El subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, dijo que Moscú no tendría más remedio que participar.
El crudo se ha hundido casi un tercio desde junio, perdiendo todas las ganancias desde que la invasión rusa de Ucrania alteró los flujos comerciales mundiales. El retroceso se ha producido mientras los bancos centrales, incluida la Reserva Federal, endurecen su política para sofocar la inflación. El plan de limitación de precios de EE.UU. pretende reducir los ingresos de Moscú por la venta de petróleo, reduciendo el flujo de fondos utilizados para financiar la guerra.
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