Calculan que Argentina debería bajar 25% su gasto primario para equilibrar sus cuentas

Así lo determinó un estudio del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF). Haciendo esa reducción, señalaron, se llegaría al equilibrio fiscal

Javier Milei, Presidente electo
29 de noviembre, 2023 | 05:00 AM

Buenos Aires — Más allá que el presidente electo, Javier Milei, viene moderando su discurso, la obsesión por lograr el superávit fiscal sigue firme. De hecho, los tres candidatos que más votos cosecharon en las elecciones generales de octubre (el propio Milei, Sergio Massa y Patricia Bullrich) coincidían en campaña respecto de la necesidad de dejar de gastar más de lo que entra para no tener que cubrir ese bache con emisión y sus consecuencias inflacionarias.

Ahora bien, ¿cuánto habría que recortar para dejar atrás el déficit? Según un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), si toma como base el gasto primario real proyectado para 2023, el logro del equilibrio fiscal requiere una baja del 25% del gasto primario. En millones de octubre de 2023, el monto de recursos es de $11.754.353 millones.

.

En términos de Producto Bruto Interno (PBI), esto implicaría que gasto público vuelva al nivel que tenía en el año 2007.

En perspectiva histórica

El recorte necesario para equilibrar las cuentas públicas, es decir, ese 25% ya mencionado respecto de 2023, implicaría que el gasto en 2024 sea, a su vez, un 32,5% menor al de 2017. En términos de Producto, habría que recortar del gasto el equivalente a un 15% del PBI. En el corriente año se hubiese requerido recortan un 19,9% de los gastos para llegar al equilibrio.

PUBLICIDAD

Según explicaron desde IARAF, con la eliminación de las transferencias corrientes y de capital a provincias, de la inversión real directa y de los subsidios a la energía, el gasto primario se ubicaría en 15,9% del PIB y se alcanzaría un superávit primario del 1,2% del PIB.

No obstante, en ese mismo escenario teórico de equilibrio primario seguiría habiendo déficit fiscal (0,9%) debido a los intereses de deuda que paga el país.

.

Al respecto, Nadin Argañaraz, presidente del IARAF, puntualizó: “Las transferencias no automáticas a provincias representa el 23% del ajuste necesario. Si se suma la eliminación de la inversión total directa, el ajuste estaría cubriendo un 48,3% de lo necesario. Al incorporar una eliminación del gasto en subsidios energéticos, el ajuste estaría cubriendo un 82,5% de los recursos necesarios y el gasto primario real descendería un 20,5%. El restante 17,5% de recursos necesarios debería provenir de otros gastos”.

PUBLICIDAD

Ajuste expansivo

Ante la consulta de este portal respecto de si el recorte del gasto no afecta también la recaudación y, por ende, torna al equilibrio como un objetivo inalcanzable, Argañaraz explicó que lo ideal sería que se de un ajuste fiscal expansivo.

Al respecto, detalló: “Si bien es recesivo quitarle recursos a la economía, si eso es captado por inversores del sector productivo como una señal necesaria para ir a un equilibrio fiscal sostenible y eficaz, eso puede limitar o anular el ajuste recesivo”.