Buenos Aires — Sofía Gancedo tiene motivos de sobra para celebrar. Bricksave, la compañía que confundó en 2016, fue recientemente seleccionada por CNBC como una de las 200 mejores fintech del mundo en 2023. También acaba de recibir un respaldo de peso: Roberto Souviron, fundador de Despegar, decidió invertir en la empresa de crowdfunding inmobiliario que ya tiene inversores de 19 países, que superó los US$32 millones invertidos, que entregó retornos por US$6,3 millones y que alcanzó las 250 propiedades financiadas.
Pero de visita en el país, la co-fundadora y COO de Bricksave no logra abstraerse del difícil contexto económico que atraviesa la Argentina. En diálogo con Bloomberg Línea, la empresaria que en 2022 fue seleccionada por Endeavor como una de las 10 mujeres emprendedoras del año, consideró que actualmente el país atraviesa “el peor de los escenarios”, debido a los altos niveles de incertidumbre, pero señaló que es “tremendamente optimista” de cara al futuro porque “Argentina dijo basta”.
En la entrevista, Gancedo también reveló la reciente incorporación de Souviron como inversor en la compañía. “Nos enorgullece. Contar con el respaldo de una persona con su trayectoria y logros en nuestros principales mercados no solo valida que vamos por el camino correcto, sino que nos motiva a ir por más”, expresó al respecto. “Su apoyo representa una oportunidad para el crecimiento y la evolución de nuestra plataforma, al mismo tiempo que refuerza nuestro compromiso de democratizar el Real Estate. Juntos, aspiramos a redefinir la forma en que el mundo ve y participa en el mercado inmobiliario”, agregó.
La siguiente entrevista fue editada por motivos de extensión y claridad.
Bricksave fue reconocida recientemente en EE.UU. como una de las 200 fintech más importantes del mundo. ¿Cómo recibieron esa noticia?
Estamos muy contentos con eso. También fue seleccionada entre las 10 más importantes en finanzas alternativas. Y además, el hecho que lo entregara CNBC, que es un medio muy reconocido mundialmente. Nosotros arrancamos como una compañía de financiamiento colectivo, siendo inversores con un mínimo de inversión de US$1.000, pero ahora tenemos todo el espectro, porque esa inversión mínima de 1.000 dólares fuimos regulados en diciembre del año pasado, por lo cual ya estamos con el mejor estudio, el más grande de Argentina y de otros países de Latinoamérica para ofrecer esos mismos activos, pero siendo el mínimo muchísimo más bajo.
¿En cuánto queda ese mínimo?
No lo tenemos definido. Creemos que va a ser 100 dólares, pero podría ser un centavo. Lo que pasa es que todos los costos iniciales ya se pagaron y ahora los costos de transacción bajan en un 60%. Esos US$1000 que teníamos inicialmente era un número arbitrario, que ahora lo vamos a bajar muchísimo, pero además lo más interesante es que se va a ofrecer a través de instituciones financieras, sociedad de bolsa, bancos, como un security.
¿Eso le dará más liquidez?
Le da liquidez y le da acceso a mucha más gente, porque no es lo mismo 1000 dólares a 100 dólares. Me gustaría que baje aún más. No lo tenemos definido. Ojalá fueran 10. Se puede establecer como método de ahorro. Así que esa es la parte de financiamiento colectivo, que estamos muy avanzados. Luego tomamos un sector medio, que son inversores entre 100.000 y 200.000 dólares. Para ellos estamos ofreciendo propiedades enteras y desarrollando una red de agentes muy grande en Latinoamérica, tanto en financiamiento colectivo como en este segmento. Para esas propiedades enteras, tenemos mucha gente que va a Estados Unidos buscando inversiones. Y el tercer segmento es el segmento donde el mínimo de inversión es un millón de dólares y es un fondo regulado, basado en Luxemburgo, que está orientado a un inversor mucho más grande, pero ahí es un fondo diversificado en diferentes tipos de propiedades, multifamilies de más unidades, menos unidades, y se maneja como una estructura de fondo. Así que hoy todo el público puede invertir con Bricksave.
Para el inversor que está pensando en ser dueño único de una propiedad, ¿qué diferencial ofrecen? ¿Por qué comprar vía Bricksave?
Desarrollamos un algoritmo que usa 70 bases de datos para buscar propiedades que nosotros creemos que se van a apreciar en 100 ciudades de Estados Unidos. Entonces, es más que un estudio, ¿no? Es un estudio muy sofisticado de cada ciudad, donde vemos, por ejemplo, la liquidez, cómo va bajando la delincuencia, cómo va aumentando el ingreso, cómo van aumentando los alquileres, cantidades vendidas, cantidades ofrecidas. Usa 3.000 puntos de data, ese algoritmo. Una vez que identificamos la propiedad, hacemos el due diligence de la propiedad durante un mes, viendo que estén las certificaciones bien, los títulos bien, y recién ahí la ofrecemos. O sea, ya la persona que está entrando, está entrando a una oportunidad que sería muy difícil que pueda hacer el análisis de manera privada. Además, tenemos economía a escala, porque no es lo mismo tener 80 propiedades en Chicago a ir a comprar una propiedad en Chicago. Luego administramos la propiedad. Hacemos la escrituración, todos los costos de transferencia. Todo está incluido en ese precio.
¿Qué significa que administran la propiedad?
Bricksave también se ocupa del asset management, del manejo de esa propiedad. Tanto desde si se rompe un caño, es decir el manejo de la propiedad física, hasta el manejo financiero. Para eso, se mantiene una reserva que está incluida en el precio inicial. Nosotros no vamos a llamar nunca a un propietario y decir, bueno, hay que pagar 1.000 dólares para cambiar un termotanque. Eso ya lo tenemos. Y la persona puede acceder de manera digital, las 24 horas del día, a ver los retornos de su propiedad y ver una descripción completa de si tuvo algún problema. Hasta puede acceder a la factura de eso. Entonces, tiene un acceso digital a una propiedad que está manejada de manera muy eficiente en Estados Unidos. O sea, se rompe un caño y el propietario se entera a través de la plataforma.
No tiene que ocuparse…
Claro. Va a ver, por ejemplo, el ingreso del mes, los costos, que más que nada es el impuesto a la propiedad y seguro que es obligatorio. Y va a ver si de su reserva se encontraron 300 dólares para el arreglo a un caño. Y si no se usa esa reserva, cuando termina el periodo de inversión, que también lo define el inversor porque es dueño del total de la inversión, se le devuelve ese capital. Ese capital no lo invertimos porque sería ilegal. Así que queda en reserva, para cada una de las propiedades. Y después está la venta. Nos ocupamos de venderlo y ellos reciben en una billetera digital el retorno neto de gastos todos los meses. Y cuando se realiza la venta, recibe el capital.
Al momento de uno hacer una compra, ¿ya está estipulado en qué momento se va a vender la propiedad?
Nosotros hacemos estimaciones entre dos y cuatro años, dependiendo la propiedad. Hay propiedades, por ejemplo, que ya por comprarla y hacer algún arreglito menor alcanza. Pero hay un plazo definido, porque ellos necesitan tener un plazo de liquidez. En el caso del propietario completo, también le estimamos un periodo de inversión, pero ellos después pueden quedársela. Nos pasa a veces que nos hacen una propuesta por una propiedad, le decimos al propietario ´querés vender´ y nos contesta que no, que está feliz con este retorno. Nosotros les presentamos esa propuesta y se quedan y siguen recibiendo el retorno y seguimos administrándosela.
¿Cuál es hoy el lugar que está generando los puntos más atractivos de entrada y salida?
Hoy es Chicago. Si fuera un país, Chicago sería la economía número 19 del mundo. Eso ya te dice mucho. Entonces, en cuanto a la liquidez es muy bueno. Y todavía hay oportunidades de apreciación. Se está expandiendo la ciudad de Chicago, hay barrios que antes eran de menores recursos o tenían menor valor y ahora se van moviendo servicios, que dan servicios a los estudiantes.
¿Cómo es el punto de ingreso y de salida de la inversión en este contexto de controles cambiarios rígidos que hay en Argentina?
Sí, complican muchísimo en detrimento de los consumidores. Tenés que tener una cuenta en el exterior. Puede ser en Uruguay, Paraguay, no se necesita que sea Estados Unidos. Pero nosotros aceptamos dinero de una cuenta bancaria con el nombre de la persona y entregamos retornos y también el principal a una cuenta bancaria con el nombre de la persona. Estamos viviendo un momento tremendamente incierto. Yo tengo la esperanza, por no decir la certeza, de que se va a liberar en el buen sentido y que la gente va a poder enviar dinero. Pero hoy, como todos saben, no se puede transferir directamente y nosotros necesitamos usar una cuenta que esté a nombre del inversor.
Como economista y empresaria argentina radicada en el exterior, ¿qué análisis hacés de la situación económica que atraviesa el país?
Es un escenario de incertidumbre que, en general, es el peor de los escenarios. Porque uno no puede tomar decisiones. Pero soy tremendamente optimista, creo que Argentina dijo basta, y también creo que se necesitan menos cambios de lo que se cree para que Argentina pueda aprovechar la enorme oportunidad que tiene. No creo que haya sido justa la organización económica de los últimos años, creo que no ha primado la meritocracia y más allá de los resultados de las PASO, mi lectura es que por fin se dijo basta. A mí me emociona que exista todavía la esperanza, en especial entre los jóvenes, que quieran creer en Argentina, que quieren un país donde la propiedad privada no se discuta, que defienden el trabajo, el esfuerzo.
¿Se vienen meses complicados para el empresario y el emprendedor?
Súper complicados. El empresario argentino es todo terreno, pero en los próximos meses… Cuando no sabes cómo vas a estructurar una compañía de exportación, cómo vas a firmar un contrato de importación, cómo vas a sembrar tu campo, es muy complicado y creo que lo que hay que hacer es mantener la cabeza arriba del agua, estar tranquilo, pensar a largo plazo y creer en Argentina. En Latinoamérica lo vemos bastante, las discusiones son muy grandes, la volatilidad en lo que puede ser la política económica en los próximos años es gigante y eso genera incertidumbre. Mucha más cuando entra en el escenario alguien que no era esperado. Pero no voy a mentir, no voy a decir que va a ser fácil este momento, aunque sí soy optimista a mediano y largo plazo.
¿Como imaginas ese largo plazo?
Para mí lo básico es el principio de la propiedad privada, que es un derecho constitucional que tenemos todos. Sobre eso y el cumplimiento de los contratos se arman estructuras sólidas donde se dan beneficios a los que hacen las cosas bien y el sistema castiga a los que no hacen las cosas bien. Y eso lo veo positivo, veo que la gente quiere ir en esa dirección y bueno, mucha gente había perdido esperanza en Argentina. Yo creo que hay una luz y que el argentino es muy capaz, muy trabajador y que tenemos muchos recursos naturales. Yo soy una emprendedora, con lo cual soy optimista por naturaleza. Mi compañía, como cualquier emprendimiento, pasó por momentos difíciles. Nadie que tiene una compañía grande puede decir que fue fácil. Pero hay cosas que no se pueden seguir discutiendo en este país.
