Citi explica qué buscan las grandes compañías para venir a Latinoamérica

Marc Merlino, director global de multinacionales de la entidad, habló con Bloomberg Línea sobre los retos y las oportunidades que tiene la región dentro de los planes de las grandes multinacionales

Por

Bogotá — Para tomar la decisión de instalarse e invertir en un país latinoamericano, las grandes multinacionales del mundo buscan que se garanticen ciertas condiciones. Marc Merlino, director global del Citi, dijo a Bloomberg Línea que apuntan a un entorno estable, con impuestos que les permitan hacer una planeación a cinco y diez años.

Ver más: México perderá oportunidad de nearshoring si gana Morena: Xóchitl Gálvez

Sin embargo, así mismo, es una región con grandes retos demográficos, sociales y políticos, por lo cual la decisión de asentarse requiere un estudio minucioso de las condiciones que ofrece.

Para entender mejor lo que buscan las grandes multinacionales en América Latina, Bloomberg Línea habló con Marc Merlino, director Global de Multinacionales de Citi, quien explicó que cada país presenta distintos retos.

A juicio de Merlino, “las grandes compañías buscan estabilidad”, y con ello se refiere a distintos aspectos como “los impuestos, las reglas de cada industria y las condiciones generales que le permitan planear”.

Ver más: Colombia alista creación de empresa con la que espera acabar el mercado ilegal de oro

Colombia es un país en el que tradicionalmente se tramitan dos reformas tributarias por cada periodo presidencial, y dice Merlino, “la estabilidad de los impuestos es muy necesaria para poder planear”. En el Gobierno de Gustavo Petro se tramitó una reforma en 2022 y no se descarta que en 2025 el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, presente un nuevo proyecto.

América Latina frecuentemente se enfrenta con el péndulo político virando de orilla a orilla. Se ha visto en Argentina, Brasil, Chile, México, Perú y más recientemente, Colombia. Sin embargo, explica Merlino que “las compañías que son nuestros clientes no son de mirar la oportunidad del corto plazo, entrar y salir, no son fondos de inversión, son compañías que buscan las condiciones para una inversión de largo aliento”.

Y agrega que, a pesar de que Colombia actualmente enfrenta serias discusiones sobre cambios en los sistemas de pensiones, salud, laborales, entre otros, “cuando las grandes compañías miran hacia Colombia ven una historia positiva”.

Con respecto al atractivo que tienen los distintos países asegura que depende del sector, pues en cada uno hay “complejidades y retos diferentes”, y destaca, por ejemplo, que México es muy atractivo, entre otras razones, por el talento humano que las compañías consiguen allí.

En el mundo cada vez hay más apetito por desarrollar proyectos con responsabilidad social, y en eso, dice Merlino, “las compañías están muy atentas a oportunidades ESG”.

Ver más: ¿Cómo están las finanzas de las empresas de la transición energética en Colombia?

En Colombia, el desarrollo de proyectos de energías limpias, como Windpeshi en La Guajira no han podido desarrollarse como estaban previstos por dificultades en el relacionamiento de las empresas a cargo con las comunidades aledañas al proyecto, no obstante, para Merlino “ese no es un problema exclusivo de Colombia” e insiste en que por eso, “nuestros clientes buscan hacerlas cosas bien para participar de la agenda medioambiental y traer las mejores prácticas”.

Merlino dice que Colombia ofrece una gran variedad de oportunidades para las multinacionales, “principalmente en sectores como el de petróleo y gas, pero también en el de renovables, tecnología y recientemente servicios”, y agrega, que eso es un plus para el país pues ofrece una gran variedad de alternativas, mientras que otros países como Argenta o Perú concentran más el interés de las empresas del sector minero.

Finalmente, explica que a pesar de que los indicadores muestran una mejoría de la economía venezolana, “aún está muy pronto para hablar de asentarse allí nuevamente”, y recuerda que hace 15 o 20 años, era un destino clave para las grandes compañías.

Por último, dijo que, si bien Colombia perdió el grado de inversión, no es un elemento determinante para que una compañía llegue al país, aunque en muchos casos puede “encarecer la financiación de un proyecto”.