Lima — La pobreza monetaria de Perú, que mide a las personas que tienen un nivel de gasto per cápita insuficiente para adquirir una canasta básica de alimentos y otros productos, subió de 25,9% a 27,5% en el 2022 a raíz de los mayores precios por la inflación -que actualmente se ubica en cerca de 8% interanual- y el menor crecimiento económico. Esto quiere decir que hay 2,7 millones más personas pobres en el país en comparación al 2019, de acuerdo al Instituo Peruano de Economía (IPE).
En Perú, en el 2022 los que consumen alimentos y otros productos o servicios en un nivel insuficiente aumentaron ante el mayor costo de la canasta básica de consumo: el gasto en los hogares peruanos escaló de 378 soles por mes a 415 soles por mes, un aumento de 9,7% según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). En dólares, el gasto de consumo de los hogares en 2022 equivale a cerca de US$112,4 mensuales.
Según ámbitos geográficos, INEI reportó que la pobreza monetaria incidió en el 41,1% de la población del área rural y al 24,1% del área urbana. En ambos segmentos se registraron aumentos: la pobreza rural subió 1,4 puntos porcentuales y en el área urbana la pobreza subió 1,8 puntos porcentuales (a un mayor nivel).
“Al comparar estos resultados con los reportados en el año 2019 -antes de la pandemia del Covid-19, en el área urbana la incidencia de pobreza creció 9,5 puntos porcentuales y en el área rural en 0,3 punto porcentual”, remarcó la entidad peruana.
El año pasado la consultora Macroconsult fue una de las entidades que advirtió de un posible aumento en la pobreza monetaria de este 2022 a raíz de los altos niveles de inflación, que afectaban a los hogares de menores ingresos en mayor medida, con lo cual anticipó que este indicador podá ubicarse en torno a 27,5% y “en 2023 apenas caería algunas centésimas”.
Dante Carhuabilca Bonett, jefe del INEI, dijo que el 27,5% de pobreza monetaria en Perú al 2022 representa a 9,2 millones de personas a nivel nacional que no llegan a un nivel de gasto del costo de la canasta básica familiar. El aumento de la pobreza monetaria en 2022 frente al 2021 es de 1,6 puntos porcentuales.
En concreto, INEI mostró que en comparación a los niveles previos de la pandemia la pobreza monetaria en 2022 es bastante mayor: entre 2019 y 2022 la pobreza monetaria subió un 7,3 puntos porcentuales, y se borraron parte de los avances que se habían dado en el 2021.
En 2021 la pobreza monetaria de Perú logró retroceder después del salto del 2020 producto del impacto de la pandemia de Covid-19, pero no pudo volver a sus niveles previos a la crisis de salud global que afectó de forma severa al país andino.
INEI reportó que en el 2020 la pobreza tuvo un retroceso de una década tras anotar un salto de 10 puntos porcentuales, con lo cual Perú pasó de tener un 20,2% de pobreza monetaria en 2019 a un 30,1% de pobreza en 2020. En el 2021, sin embargo, la pobreza monetaria afectó al 25,9% de la población del país al cierre del 2021, unos 4,2 puntos porcentuales por debajo de la cifra.
En el 2021 INEI informó que los mayores niveles de pobreza se registraron en la sierra rural (44,3%) y selva rural (35,0%), que comparados con los resultados del año 2020 presentaron disminuciones de 6,1 puntos porcentuales y 4,2 puntos porcentuales, respectivamente.
Además, la pobreza extrema en Perú también aumentó en 2022 frente al 2021 pasando de 4,1% a 5% -0,9 puntos porcentuales por encima-. Frente a los resultados previos a la pandemia (2019), la pobreza extrema de Perú es mayor en 2,1 puntos porcentuales al 2022.
¿QUÉ ES LA POBREZA MONETARIA Y CÓMO SE MIDE?
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) la línea de pobreza en el Perú se calcula de acuerdo al costo de una canasta básica de consumo de alimentos y no alimentos. En el 2021 el costo de esta canasta básica familiar ascendió a 378 soles mensuales por habitante (poco más de US$100), mientras que en el 2022 el costo de la canasta básica familiar escaló a 415 soles mensuales por persona (cerca de US$112,4).
Se considera pobre, así, a una persona cuyo gasto mensual en Perú está por debajo de los 112,4 dólares.
Mientras tanto, el gasto real por habitante mensual, que incluye compras, autoconsumo, autosuministro, pago en especie, entre otros aspectos, pasó de 820 soles en 2021 a 825 soles por habitante en Perú en 2022. Sin embargo, en comparación a las cifras antes de la pandemia (2019), el nivel de gasto por habitante mensual ha retrocedido un 10%, con las poblaciones de menores ingresos disminuyendo en promedio más de 2,5% en 2022.
INEI también remarcó que aunque en el 2022 hubo una recuperación del ingreso real por habitante mensual, pasando de 1.074 soles por mes en 2021 a 1.089 soles por mes el año pasado (1,4% de incremento), en comparación con el 2019 la caída de ingresos por habitante mensual en el 2022 anota un retroceso de 9,2%. Eso quiere decir que los ingresos mensuales por habitante no recuperan sus niveles previos a la pandemia del Covid-19.
