El repunte del crudo genera efectos dispares en América Latina: fortalece a exportadores como Colombia y Brasil, pero complica la balanza comercial y las decisiones de los bancos centrales.
Los bonos del Tesoro de EE.UU. están a la baja desde que las tensiones entre Israel e Irán se agudizaron y es probable que la presión tenga un efecto duradero.
La caída del petróleo y el repunte de otras materias primas han generado efectos mixtos en la economía global. Esta divergencia puede impactar las finanzas públicas de algunas economías.