Ciudad de Panamá — Utilizando fenómenos globales para tratar de explicar lo que pasa en Panamá con el reciente descontento social, el vicepresidente José Gabriel Carrizo dijo que desde el exterior se mira “de manera optimista como se manejó la crisis, la forma prudente con base al diálogo y que en medio de la pandemia se redujo la pobreza”.
En un encuentro con periodistas de prensa extranjera, Carrizo y parte de su equipo se refirieron al alto costo de la vida, la pandemia y el manejo que le dio Panamá, la pobreza y la importancia de la atención de la infancia, la digitalización de los procesos y la lucha contra la corrupción.
En este sentido, el ministro de Economía y Finanzas, Héctor Alexander, dijo que el gobierno ha pasado “de choque en choque” lo que no ha permitido ejecutar el plan estratégico que ha diseñado la administración de Laurentino Cortizo para enfrentar la tensa situación que se vive en el país derivada de la inflación.
Producto de las protestas en un país que se ha visto como modelo de desarrollo, las calificadoras de riesgo Moodys y Fitch Ratings dieron a conocer su preocupación por las crecientes protestas y sus consecuencias fiscales, calificándola, en el caso de Fitch, como el “malestar social más importante en las últimas tres décadas en Panamá”.
¿De dónde saldrán los fondos?
El gobierno y distintos sectores sociales y gremiales han sostenido una serie de pláticas en la mesa única del diálogo para solventar la situación social, así como para aliviar los bolsillos de miles de familias que enfrentan los efectos de la carestía y la ola de aumentos en los productos de la canasta básica.
Alexander reconoció que no se ha definido de dónde saldrán los fondos para hacerle frente a los compromisos adquiridos del diálogo que actualmente se desarrolla entre los grupos manifestantes y las autoridades, y que primero debe saber a cuánto asciende dicho monto.
Producto del diálogo, que tiene entre su agenda abordar el tema de la corrupción además del costo de la vida, se pactó que el galón de gasolina quede en 3.25 dólares, así como el congelamiento del precio de 72 productos de la canasta básica de alimentos.
“Hay que seguir reestructurando el presupuesto”, acotó Alexander, porque se trata de una historia en desarrollo, respondió en torno a si se emitirá una nueva deuda.
El dilema de las partidas
En el encuentro, el vicepresidente Carrizo no aclaró la manera en que el gobierno manejará una petición surgida por parte de grupos juveniles de eliminar las partidas presupuestarias 172 y 080, que la administración utiliza para contratar personal, a pesar de que Bloomberg Línea lo preguntó en tres ocasiones.
Estas partidas son conocidas por múltiples escándalos de corrupción en los que los diputados obtienen fondos a través de contratos de trabajo en los que los consultores o personal no efectúan labor alguna pero por firmar el cheque el dinero retorna a ellos.
Carrizo hizo un recuento de lo que consideró hitos de transparencia en la administración actual, resaltó la publicación “con el detalle del último centavo” de los gastos de la pandemia, el nombramiento de magistrados y su metodología para elegir a los más aptos.
Aseguró que el aumento de las planillas anualmente obedece a legislaciones especiales, sin mencionar cuáles son. Añadió que el porcentaje con el que esta administración ha incluido personal es menor que al de los dos últimos gobiernos.
Sin embargo, las cifras oficiales no coinciden con esto. Según el último informe de la Contraloría General de la República, de enero a septiembre de 2021 la planilla estatal aumentó en 211 millones, con poco más de 11 mil funcionarios nuevos respecto al periodo pasado, y desglosa que apenas 21.4 millones de dólares, es decir el 11% o 451 servidores se sustentó a la creación de leyes especiales.
Por su parte, Juan Antonio Ducruet, director del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales y vocero presidencial, dijo que la reducción general del 10% de la planilla de gobierno que comenzaría con un programa de retiro voluntario.
Previamente, Mitchell Doens, miembro del gobernante Partido Revolucionario Democrático (PRD), presente en el conversatorio, descartó despidos.
