Bloomberg — El día de Navidad fueron atacadas cuatro subestaciones eléctricas en el estado de Washington, en EE.UU., interrumpiendo el servicio a miles de residentes, apenas unas semanas después de que disparos contra instalaciones de este tipo en Carolina del Norte provocaran una investigación del FBI.
Las fuerzas de seguridad investigan ahora al menos ocho ataques contra centrales eléctricas en cuatro estados en el último mes, las cuales han puesto de relieve la vulnerabilidad de la red eléctrica del país. Se desconoce si están relacionados entre sí.
Según el Departamento del Sheriff del condado de Pierce, en los incidentes más recientes, ocurridos en las afueras de Tacoma, Washington, miles de personas se quedaron sin electricidad después de que unos vándalos forzaran la entrada en cuatro subestaciones y dañaran los equipos, lo que en un caso provocó un incendio. En total, 14.000 personas se quedaron sin suministro eléctrico a causa de esos ataques a subestaciones propiedad de Tacoma Public Utilities y Puget Sound Energy, según la oficina del sheriff, que dijo que la mayor parte del suministro se ha restablecido.
“Se desconoce si hay motivos o si se trató de un ataque coordinado contra los sistemas de energía”, dijo la oficina del sheriff en un comunicado.
Los ataques se producen pocas semanas después de que un tiroteo en dos subestaciones de Carolina del Norte dejara sin electricidad a 45.000 hogares y empresas.
En enero, el Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. advirtió en un informe que extremistas nacionales han estado desarrollando “planes creíbles y específicos” para atacar la infraestructura eléctrica desde al menos 2020.
Lea más en Bloomberg.com
