Las temperaturas cada vez más altas están afectando nuestra salud mental

Una persona que haya experimentado una ola de calor o un desastre climático no necesita de estudios para saber que afecta tanto el cuerpo como a la mente

Sevilla
Por John Tozzi
21 de julio, 2023 | 06:59 AM

Bloomberg — Las temperaturas están registrando valores extremos a lo largo del mundo. Son de sobra conocidos los peligros que un nivel excesivo de calor representa para el cuerpo humano. Tan solo en EE.UU., esto ocasiona cientos de fallecimientos cada año y decenas de miles de visitas al hospital (y eso en un país más preparado que la mayor parte del mundo para hacerle frente). No obstante, el impacto de estos veranos más calientes sobre nuestra salud mental no está tan claro.

Además de las consecuencias inmediatas del alza de las temperaturas, hay un problema psicológico más general, que consiste en vivir en un planeta que se está calentando cada vez más. Ya en 2022, la OMS exhortó a los países a incorporar consideraciones relativas a la salud mental a la planificación para hacer frente al cambio climático. Se prevé que el calentamiento global siga incrementando los niveles de tensión y angustia, como advierte el IPCC (por sus siglas en inglés, Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático).

El incremento de las temperaturas, sobre todo los repuntes anómalos y las olas de calor, podrían estar relacionados con un mayor índice de suicidios y de idas al hospital por trastornos mentales, según ha puesto de manifiesto una nueva revisión de estudios recogida en una entrada de la revista The Lancet. Hay varias formas en que esto ocurre; para empezar, el impacto del calor en determinadas funciones físicas, como el flujo sanguíneo, puede repercutir en el estado mental. Asimismo, puede perturbar el sueño, lo que podría producir alteraciones cognitivas, indicaron los responsables de la investigación. Y ciertos fármacos psiquiátricos también pueden interferir con la regulación de la temperatura corporal.

Ahora bien, en términos generales, los indicios detectados por los investigadores de The Lancet “tienen un grado de certeza bajo”, de modo que es necesario seguir investigando.

PUBLICIDAD

Los efectos sobre la salud mental estuvieron más asociados con variaciones extremas en las temperaturas que con temperaturas altas absolutas. Esencialmente, las personas acostumbradas a un clima caluroso se vieron menos afectadas por él. Considerando esto, “el cambio climático podría no aumentar, necesariamente, los problemas de salud mental porque las personas podrían adaptarse con el tiempo, lo que significa que las temperaturas más altas podrían volverse normales y no ser percibidas como anómalas o extremas”, escribieron los autores.

Pero el cambio climático también aumentará las olas de calor y la variabilidad de la temperatura, que son los tipos de eventos atípicos relacionados con la angustia mental, escribieron. Hicieron un llamado a tomar “medidas para mitigar el cambio climático e incrementar la resiliencia en infraestructuras, sistemas de salud y comunidades”. La exposición a condiciones climáticas extremas, como huracanes, también está relacionada con problemas de salud mental.

Cualquiera que haya experimentado una ola de calor o un desastre climático no necesita un estudio de investigación para saber que puede afectar tanto el cuerpo como la mente.

PUBLICIDAD

Las personas vivas hoy se encuentran entre las primeras generaciones en experimentar las consecuencias del cambio climático. Pero no seremos los últimos. Comprender cómo esto afecta nuestra mente y nuestro cuerpo es fundamental para encontrar el camino a seguir.

Lea más en Bloomberg.com