La mayoría de los latinoamericanos y caribeños perciben los efectos del cambio climático en su vida cotidiana, pero siete de cada 10 indican que este fenómeno está afectando su economía, según reveló el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
La organización financiera realizó la encuesta sobre el clima en Latinoamérica y el Caribe en mayo de 2023, donde participaron más de 10.500 individuos de 13 países de la región.
El 91% de los encuestados manifestó sentir los efectos del cambio climático en su vida cotidiana, con altos porcentajes en Uruguay (84%) o El Salvador (96%). Pero, además, el 70% indicó que el cambio climático afecta negativamente sus ingresos o fuente de sustento. La mayoría comparte esta opinión, con cifras que oscilan entre el 58% en Uruguay y el 77% en Perú.
Es así que el cambio climático es uno de los retos a los que se enfrenta la mayoría de los países de la región, junto con la violencia y la delincuencia, la pobreza, el desempleo y las desigualdades sociales.
Asimismo, este fenómeno que va in crescendo, lleva a los individuos a considerar mudarse a otros países. Según el BEI, en nueve de los 13 países encuestados, más de la mitad de la población así lo cree (desde el 50,5% en Argentina hasta nada menos que el 61% en Ecuador). Esa decisión se ve más fuerte entre los más jóvenes con un 59% de adhesión.
Existe también una mayoría (88%) a favor de que los gobiernos apliquen medidas más estrictas para combatir el cambio climático; así como un 80% que cree que su país debería dar prioridad a las inversiones en energías renovables frente a los combustibles fósiles u otras fuentes de energía no renovables.
El 51% de los encuestados prefiere fuentes de energía renovables de gran envergadura, como centrales hidroeléctricas, eólicas, solares o geotérmicas, mientras que el 29% prefiere paneles solares en tejados o pequeñas centrales hidroeléctricas.
Negacionistas del cambio climático
A pesar de la concienciación generalizada, la región presenta un bajo porcentaje de negacionistas del cambio climático, con un promedio de solo un 5% por país. Es así que, Argentina es el país con la tasa más alta de negacionistas, (9%), esto se contrapone con las consecuencias del fenómeno que ya sufre ese país, donde el 24% de los encuestados ya ha sufrido escasez de agua en situaciones tales como desabastecimiento y conflictos por los recursos hídricos.
Del mismo modo, el 60% de los argentinos cree las políticas para enfrentar el cambio climático que se pueda generar desde el estado serán una fuente de crecimiento económico y riqueza para su país, y el mismo porcentaje estima que crearán más puestos de trabajo nuevos que los empleos existentes que se destruyan.
Por otro lado, Costa Rica registra una tasa inferior al 2%: entre los costarricenses encuestados, el 94 % dice sentir los efectos del cambio climático en su vida cotidiana, y el 64% afirma que le afecta “mucho”.