Bloomberg — El ejército ucraniano dijo que sus tropas lograron avances en el frente de batalla meridional, quebrando defensas rusas como parte de su contraofensiva, que ya lleva 4 meses de duración.
En concreto, las fuerzas de Kiev avanzaron hacia el pueblo de Verbove, en la región sureña de Zaporiyia, como parte de su avance hacia los bastiones de Tokmak y Melitopol. El Institute for the Study of War citó un “avance táctico clave” al oeste de Verbove, aunque dijo que la situación es dinámica y podría cambiar.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, dijo que la ofensiva continuará durante el otoño e invierno en el Hemisferio Norte para mantener la presión sobre las fuerzas rusas.
Desde junio, el ejército del país ha tenido dificultades para avanzar a lo largo de una línea del frente que se extiende desde la región de Donbás, en el este de Ucrania, por el sur hasta la desembocadura del río Dnipro. Las tropas del Kremlin han pasado meses construyendo una red defensiva de varios niveles, que incluye campos de minas, zanjas y bloqueos de cemento conocidos como dientes de dragón.
Ante la preocupación de que la llegada del frío suponga un nuevo revés, las autoridades ucranianas han asegurado que los combates continuarán. El general estadounidense Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto, declaró la semana pasada que a Kiev “le queda mucho tiempo de combate” y que el terreno fangoso dará paso al suelo helado, lo que permitirá que la ofensiva se prolongue hasta el invierno.
“Cambios rápidos”
El ejército ucraniano está ampliando los avances logrados hace un mes, cuando sus fuerzas perforaron la primera línea de fortificaciones rusas en torno al asentamiento de Robotyne, que fue reconquistado a las tropas del Kremlin. La semana pasada, Zelenskiy declaró a los medios de comunicación estadounidenses que Ucrania “desocupará otras dos ciudades”, aunque no las identificó. También dijo que sus tropas tomarán Bajmut, una ciudad del este que cayó en manos de Rusia tras meses de sangrientos combates a principios de este año.
Rusia respondió con ataques aéreos en Robotyne, Verbove y otros pueblos de la región de Zaporizhzhia en las últimas 24 horas, según informó el Estado Mayor. Las fuerzas ucranianas repelieron los ataques.
Aunque detalló los avances, el ISW con sede en Washington dijo que la situación sobre el terreno está “cambiando rápidamente” - y que era demasiado pronto para predecir un avance significativo.
“Los observadores deben ser pacientes con el diseño de la campaña de Ucrania y deben esperar que la contraofensiva de Ucrania continúe durante el invierno de 2023 y en la primavera de 2024″, dijo el ISW en un informe diario. “Ucrania no necesita lograr una penetración profunda repentina y dramática para lograr el éxito”.
En otros lugares, Rusia lanzó un fuerte ataque con misiles y aviones no tripulados en la región de Odesa, en el mar Negro, durante la noche, dañando la infraestructura portuaria, instalaciones de almacenamiento de granos, almacenes y varios edificios residenciales en las afueras de la ciudad portuaria. La semana pasada, Rusia envió una andanada de misiles y aviones no tripulados contra las infraestructuras energéticas del centro y el oeste de Ucrania, lo que provocó cortes de electricidad, según declaró Kiev.
Ucrania ha atacado las líneas de suministro de Rusia, incluso en Crimea. La administración estadounidense dijo a Zelenskiy que proporcionará un pequeño número de misiles ATACMS de largo alcance.
--Con la colaboración de Andrea Dudik.
Lea más en Bloomberg.com
