Buenos Aires — Luiz Inacio da Silva, presidente de Brasil, recibirá este sábado en Foz de Iguazú al presidente de Argentina, Javier Milei, y sus pares de Uruguay (Yamandú Orsi) y Paraguay (Santiago Peña), en un encuentro que tendrá un sabor amargo, tras la decisión del Consejo europeo de postergar la firma del acuerdo con el Mercosur ante el rechazo de Francia y las dudas de Italia, por presión de los agricultores locales.
No hay relación política entre Lula y Milei. Hay un sólo punto de encuentro: la necesidad de que el Mercosur alcance un acuerdo comercial con la Unión Europea. Pero esa posibilidad se dilató esta semana,
Lula intercedió para que la aprobación no se frustrara. E incluso postergó para este sábado el encuentro que debía realizarse semanas atrás, con el objetivo de llegar a la cumbre con el acuerdo aprobado. No será así.
La aprobación del acuerdo, tras más de dos décadas de negociaciones, y avaladas por los bloques este año, depende ahora del Consejo de la Unión Europea, que postergó esta semana su votación tras la disidencia de Francia, con apoyo de Italia.
¿Cuándo se tratará el acuerdo?
El 12 de enero es la fecha en la que el Consejo de Unión Europea planea volver a reunirse y tratar el acuerdo con el Mercosur, que tiene el aval de la mayoría de los miembros. Según Bloomberg Economics, este acuerdo impulsaría la economía del bloque Mercosur hasta en un 0,7% y la de Europa en un 0,1%.
La alianza comercial entre los bloques crearía un mercado integrado de 780 millones de consumidores. Propone eliminar gradualmente aranceles sobre bienes como automóviles o maquinaria, mientras que le daría a Europa un acceso más fácil a la industria agrícola del Mercosur, lo que genera el rechazo de los agricultores franceses e italianos.
Este año el Mercosur ya firmó un acuerdo comercial con los Estados de la EFTA (Islandia, el Principado de Liechtenstein, el Reino de Noruega y la Confederación Suiza), que creará un área de libre comercio de casi 300 millones de personas con un PBI combinado de más de US$4,3 trillones. Este acuerdo aspira a un acceso a los mercados para más del 97% de sus exportaciones.
Javier Milei ha amenazado en más de una oportunidad a abandonar el bloque regional si no se permite una mayor flexibilidad para que los países alcancen acuerdos de libre comercio bilaterales, algo que no está habilitado.
“Hemos estado discutiendo y definiendo los lineamientos a futuro de lo que tenemos que negociar los países miembros. Lo que necesitamos desde Argentina es una mayor flexibilización del Mercosur que permita generar acuerdos bilaterales con otros países para potenciar el comercio y las inversiones entre países”, dijo el canciller Pablo Quirno.
El de este sábado, será un nuevo encuentro entre Lula y Milei, tras fríos antecedentes. En el Palacio San Martín, sede de la Cancillería argentina, interpretaron la decisión de Milei de asistir a la cumbre como un guiño de apoyo a su par brasileño por las gestiones realizadas para que no se caiga el acuerdo comercial.
