Bloomberg — El hijo mayor del expresidente Jair Bolsonaro dijo que su padre no está huyendo de la justicia brasileña al solicitar una visa estadounidense de seis meses y que regresaría a su país si es llamado por las autoridades.
“No tiene nada que esconder, no tiene nada que temer y no está allí para huir de nadie”, dijo Flavio Bolsonaro a periodistas al llegar al Senado el miércoles para el inicio del año congresual. “Si necesita estar aquí por alguna razón, estará. Pero no tiene que hacerlo en este momento”.
Bolsonaro solicitó un visado de turista de seis meses la semana pasada, lo que demuestra que no tiene prisa por abandonar Florida, adonde viajó apenas dos días antes del final de su mandato para faltar a la toma de posesión de Luiz Inácio Lula da Silva el 1 de enero. En su país, está siendo investigado en múltiples frentes, incluida su presunta implicación en los disturbios del 8 de enero protagonizados por partidarios que se negaban a aceptar su derrota en las elecciones de octubre.
Flavio dijo que espera que su padre regrese a Brasil “pronto”, aunque no pudo predecir cuándo.
Bolsonaro participó anoche en un acto en Orlando con simpatizantes que pagaron entre 10 y 50 dólares cada uno para verle, y prometió seguir activo en la política de Brasil. Está previsto que asista a un acto similar el 3 de febrero en Miami, en uno de los campos de golf de Donald Trump.
AG Immigration, la firma que está asistiendo a Bolsonaro en el proceso de convertir su visa diplomática en una visa de visitante, dijo en un comunicado que el presidente no está participando en actividades no remuneradas que puedan plantear un problema para su solicitud.
“De hecho, no puede trabajar o realizar cualquier tipo de actividad remunerada en los EE.UU., y AG Inmigración ha estado proporcionando orientación para garantizar que no se rompan las normas de inmigración de EE.UU.”, dijo en el comunicado.
La exprimera dama Michelle Bolsonaro, que también estuvo en el Senado para la toma de posesión de los legisladores aliados, dijo que su marido no teme ser arrestado.
“No es él quien tiene que temer la prisión”, dijo, sin especificar quién debería temer en su lugar.
Lea más en Bloomberg.com