Santiago — La inflación en Chile se ha convertido en un enorme problema, al punto que tanto el Gobierno como el Banco Central (BCCh) están dispuestos a resignar crecimiento económico con tal de controlar el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y acercarlo a la meta establecida por la autoridad monetaria entre 2023 y 2024.
Pero la inflación no golpea a todos por igual: en el último año está impactando más a los mayores adultos y, particularmente, a los de menor ingresos.
El Índice de Precios del Adulto Mayor (IPAM) de febrero tuvo una variación mensual de -0,2% y de 12,5% en los últimos doce meses, consigna un informe del Centro de Políticas Públicas de la Universidad de San Sebastián, encargado de confeccionar este indicador.
Cabe señalar que la inflación general del período, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), fue del 11,9%, por lo que la de los mayores adultos está 0,6 puntos porcentuales por encima.
Pero hay un dato que agrava la situación relacionado con lo que sucede con las personas mayores de menor poder adquisitivo: El porcentaje de aumento de precios asciende a 13,7% para los hogares pertenecientes al quintil de menores ingresos (IPAM Q1), reseña el documento.
La inflación de los mayores adultos
El IPAM analiza las mismas divisiones del IPC, pero con ponderaciones diferentes, ya que busca representar el gasto de los hogares liderados por un adulto mayor.
Karol Fernández, investigadora del Centro de Políticas Públicas Universidad de San Sebastián, indicó que la brecha entre IPAM e IPC se redujo marginalmente en febrero, pero aclaró que “es importante no pasar por alto que desde octubre de 2021 la inflación para los adultos mayores supera al IPC”.
La investigadora mencionó: “Seis de las doce divisiones de su canasta presentan alzas acumuladas en 12 meses mayores que para el resto de la población. Por ejemplo, alimentos y bebidas no alcohólicas, disminuyeron este mes, pero acumulan un alza en 12 meses de 21,5%”.
Por su parte, Felipe Bettancourt, otro de los autores del informe, añadió: “Al comparar el IPAM-Q1 con el IPC vemos que el grupo de adultos mayores más vulnerables ha evidenciado un alza de precios de 1,8 puntos porcentuales más que la población en general en los últimos doce meses. Si bien esta brecha se redujo, en el corto plazo es difícil proyectar que se instale por debajo del IPC”.
Sugirió que, por eso, sería “fundamental que aportes estatales, como la Pensión Garantizada Universal, se basen en herramientas como el IPAM para los respectivos reajustes, pues reflejan de mejor manera la realidad de este grupo etario”.
