Bloomberg Línea — Perú, Colombia y Chile apuntan a acortar la brecha con México en la industria del aguacate, a medida que fortalecen su presencia global con estrategias diferenciadas.
El Avocado Value Index (AVI) muestra que Perú, Colombia y Chile ya no compiten solo por volumen, sino por estrategias de rentabilidad y estabilidad que les podrían permitir acortar la brecha frente dominio histórico de México.
El índice muestra que, aunque los precios de exportación promedio de Perú (US$1,84/kg), Colombia (US$1,90/kg) y Chile (US1$,92/kg) son muy similares, cada país adopta una estrategia distinta para capitalizar su posición, de acuerdo al reporte de Loads, una plataforma de tecnología de alimentos latinoamericana.
Ver más: El precio del aguacate podría subir aún más si Trump cumple con aranceles a México
El AVI evidencia que la competitividad internacional del aguacate latinoamericano depende cada vez más de cómo se gestiona el valor, no solo de cuánto se produce.
México juega a volumen porque tiene lo que ningún otro: una producción masiva y estable, una industria muy integrada y la ventaja de estar al lado del mercado estadounidense, que absorbe gran parte de su oferta.
Esa escala le permite ser dominante y mantener presencia continua.
Perú redujo volúmenes en 2024, pero elevó el valor total exportado, priorizando rentabilidad sobre cantidad.
Entre tanto, Colombia se apalanca en su capacidad de ofrecer fruta todo el año, lo que le da estabilidad y poder de negociación.
Y Chile concentra su producción en ventanas cortas de alta demanda, maximizando márgenes estacionales, según el reporte. En Chile, las exportaciones de aguacate son menores pero concentradas en productos premium en precio. De acuerdo a los autores del reporte, Chile ha sabido jugar en dos frentes.
Por un lado, destina su producción de mayor calidad y en las ventanas de mayor precio a los mercados internacionales, lo que le permite capturar márgenes premium.
Pero, al mismo tiempo, mantiene un volumen importante para el mercado interno, donde el consumo de aguacate es parte de la canasta básica y tiene un arraigo cultural fuerte.
En conjunto, los números reflejan que la competitividad no depende solo del precio por kilo, sino de cómo cada productor gestiona la estacionalidad, el poder adquisitivo de sus mercados destino y la diversificación de su oferta.
“Pese a las diferencias productivas, los tres países mantienen una competitividad equilibrada, donde la estacionalidad y diversificación de mercados son los principales factores que determinan rentabilidad y posicionamiento internacional”, explicó Loads.
Ver más: “No hay paz con la barriga vacía”: la lucha en Latam contra el hambre y el acceso a una dieta sana
Mercado del aguacate en Latinoamérica
Latinoamérica concentra más del 60% de la producción mundial de aguacate y el 62% de las exportaciones, de acuerdo a datos divulgados en el reporte.
México ocupa el primer lugar, con un 41,9% del total de las exportaciones globales, con un valor estimado en los US$3.780 millones.
Para 2025 se espera que México pueda superar la frontera de los US$4.000 millones, según proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), citadas en el reporte.
En Latinoamérica le sigue Perú, que en 2024 exportó US$1.240 millones (el 13% del mercado global).
“Los patrones de consumo de aguacate se están acelerando. Es un mercado en expansión en el que los países de América Latina se están posicionando como los líderes indiscutibles”, dijo Larry Gil, CEO de Loads.
Explica que esto tiene impactos significativos en la economía externa e interna, que deben analizarse para diseñar políticas públicas que atiendan tanto a productores como a consumidores.
México suministra más del 90% de los aguacates que comen los estadounidenses.
El país cuenta con escala, tradición productiva y la ventaja de la cercanía geográfica con Estados Unidos, en donde el consumo de aguacate se ha duplicado, pasando de 597.000 toneladas métricas en 2010 a 1,47 millones en 2023, según Loads.
Ver más: Latinoamérica consolidará su estatus como principal exportador agrícola del mundo: OCDE
En cambio, Perú, Chile y Colombia dependen en mayor medida de Europa, región que presenta una estacionalidad que impacta directamente en su demanda y precios.
Loads dice que Perú se ha venido posicionado gracias a acuerdos comerciales y a un calendario que le permite abastecer a Europa en ventanas donde México no está tan presente.
De hecho, según el documento, Perú logra superar la cantidad de aguacate exportado por México en ciertos momentos del año, coincidiendo con los valles de producción mexicanos.
Colombia aporta la posibilidad de producir todo el año, algo que pocos países pueden ofrecer, lo que le da estabilidad de suministro.
Y Chile ha sabido jugar con ventanas estacionales muy específicas, maximizando márgenes en momentos de alta demanda.
En conjunto, según Loads, estos países combinan condiciones naturales, acuerdos de acceso a mercados y estrategias comerciales que los han puesto al frente del negocio global del aguacate.
Estrategia exportadora define accesibilidad local
Otra de las conclusiones del reporte de Loads es que la estrategia exportadora define no solo la posición internacional, sino también la accesibilidad local.
Larry Gil, CEO de Loads, dice que “a pesar de contar con volúmenes de producción significativamente superiores a los de toda la región, México presenta una accesibilidad mucho más baja medida en kilos que un trabajador puede adquirir con el salario mínimo”, señala Gil.
Por su parte, Perú y Chile, con menor volumen, suelen reducir la oferta local y subir los precios internos al enfocarse en exportaciones.
“Resulta interesante y hasta contradictorio observar cómo países que son grandes productores tienen, al mismo tiempo, una menor accesibilidad interna al propio producto”, dijo Gil.
Colombia está en un punto intermedio: gana competitividad internacional gracias a su producción continua, pero a medida que crezcan las exportaciones tendrá que “cuidar que ese éxito no se traduzca en menor accesibilidad para su propia población”.
En definitiva, según el informe, el reto es encontrar un equilibrio entre capturar valor afuera y garantizar asequibilidad adentro.
Ver más: Choques sociales y ambientales, el lado gris del ‘boom’ del aguacate colombiano