El movimiento amplía la postura bajista de Burry sobre los valores tecnológicos altamente valorados y se hace eco de su anterior posición corta sobre el líder de chips Nvidia.
Agregar CarPlay representaría un giro sorprendente para Tesla y su CEO, Elon Musk, quien durante años ignoró los pedidos de implementar la popular función.
Las empresas ya tienen vínculos comerciales: xAI invirtió casi US$200 millones en las baterías Megapack de Tesla en 2024, y Tesla ha integrado Grok, el chatbot de la startup de IA, en sus vehículos.
El plan de compensación por US$1 billón refuerza la permanencia de Musk al frente de Tesla, pero el mercado reacciona con cautela ante metas operativas y financieras que lucen ambiciosas.
La corrección en tecnológicas ligadas a la IA arrastró al Nasdaq, mientras crece la preocupación por el impacto económico del cierre del gobierno federal y la falta de datos oficiales.
Tesla lleva mucho tiempo presionando a las autoridades para que den luz verde a su software que, a pesar del nombre, requiere una supervisión humana constante e intervenciones frecuentes.