Blinken no descarta el eventual envío de aviones de combate a Ucrania

Hasta ahora, Estados Unidos ha rechazado las peticiones ucranianas de aviones de combate, por considerarlas demasiado provocadoras

Un avión de combate F-16 Fighting Falcon de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, fabricado por Lockheed Martin Corp, realiza maniobras en el Salón Aeronáutico de Singapur celebrado en el Centro de Exposiciones Changi en Singapur, el martes 6 de febrero de 2018.
Por Courtney McBride
08 de febrero, 2023 | 08:17 PM

Bloomberg — El gobierno de Estados Unidos sigue resistiéndose a las peticiones de proporcionar aviones de combate a Ucrania, pero el Secretario de Estado, Antony Blinken, no descartó categóricamente el envío de este tipo de ayuda en el futuro.

“A cada paso del camino, según han ido evolucionando las necesidades, también lo ha hecho lo que hemos proporcionado a Ucrania”, declaró Blinken a los periodistas en Washington cuando se le preguntó sobre el envío de aviones. “Y eso ocurrió más recientemente con la decisión de proporcionar los tanques Abrams, y por supuesto Alemania proporcionando los tanques Leopard y otros europeos haciendo lo mismo”.

Hasta ahora, Estados Unidos ha rechazado las peticiones ucranianas de aviones de combate, por considerarlas demasiado provocadoras. Pero el Primer Ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, declaró el miércoles que su país formará a pilotos ucranianos en el pilotaje de cazas occidentales, y que estudiará la posibilidad de suministrar este tipo de aviones.

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Junto al Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, en el Departamento de Estado, Blinken afirmó que la ayuda estadounidense y extranjera en materia de seguridad a Ucrania sigue evolucionando para adaptarse a la naturaleza cambiante del conflicto.

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“Lo que es vital no es sólo un sistema de armamento concreto, una pieza de equipamiento”, dijo Blinken. “Igualmente importante es la capacidad de los ucranianos para utilizarlo con eficacia. Y eso requiere en algunos casos una formación significativa. Igualmente importante es la capacidad de mantenimiento. Y por último, todo eso tiene que reunirse en una estrategia coherente”.

La administración Biden se opuso durante mucho tiempo a las peticiones ucranianas del tanque Abrams, alegando problemas que iban desde el combustible y la logística hasta los requisitos de adiestramiento de los soldados ucranianos. Finalmente, Estados Unidos accedió a enviar el codiciado vehículo para allanar el camino a un mayor número de tanques Leopard de fabricación alemana.

“Se trata de un proceso en evolución, y seguiremos evaluando lo que creemos que Ucrania necesita y lo que creemos que puede utilizar con mayor eficacia”, declaró Blinken.