Bloomberg — Eslovaquia no tiene planes de abandonar rápidamente el suministro de petróleo ruso, dijo el presidente Peter Pellegrini al presidente estadounidense Donald Trump durante unas conversaciones en Nueva York esta semana.
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Trump ha estado presionando a los holdouts de la Unión Europea -Hungría y Eslovaquia- para que pongan fin a las importaciones de crudo ruso, argumentando que ayudaría a ahogar la financiación bélica de Moscú y empujaría al presidente Vladimir Putin hacia conversaciones de paz.
Pero Eslovaquia, un país del este de Europa sin salida al mar que limita con Ucrania, se resiste, alegando obstáculos tecnológicos y una capacidad limitada en las rutas alternativas.
“Si el cambio va a llegar en los próximos años, se llama diversificación”, dijo Pellegrini a Trump cuando ambos se reunieron el 23 de septiembre en Nueva York, según una declaración enviada por correo electrónico por la oficina del líder eslovaco el sábado.
“Eslovaquia necesita tres, cuatro, cinco fuentes diferentes de gas y energía. No podemos sustituir la dependencia de Rusia por la dependencia de Estados Unidos”, dijo, según el comunicado.
Pellegrini dijo que Eslovaquia no puede diversificar suficientemente a corto plazo sus proveedores de energía sin apoyo técnico y logístico.
Describió la reunión con Trump como constructiva, en la que el presidente estadounidense escuchó sus argumentos. “Tenía una sonrisa en la cara, pero me dijo directamente: haz algo al respecto”, dijo Pellegrini.
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Por otra parte, esta semana el primer ministro húngaro, Viktor Orban, contraatacó a Trump en materia energética, afirmando que renunciar al petróleo y al gas rusos arruinaría la economía del país.
La Unión Europea está considerando medidas comerciales dirigidas a las importaciones de petróleo ruso que le quedan, informó Bloomberg el 20 de septiembre, citando a personas familiarizadas con los planes.
Las compras a Rusia ascienden a sólo el 3% de las importaciones de crudo de la UE, frente a cerca del 27% antes de la invasión rusa de Ucrania, según estimó la UE en mayo.
Trump también ha presionado a Turquía e India para que dejen de comprar petróleo a Rusia.
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