:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/NOW3R5L6ZJFVDNQ3TNYMOVIPB4.jpg "Transeúntes cruzan el Puente de Londres en la City de Londres, Reino Unido, el martes 21 de marzo de 2023. E")
Bloomberg — Por lo general, trabajar en un bufete de abogados de alto nivel significaba dos cosas: horarios extensos y una cuenta bancaria abultada. Mientras intentan competir en salarios con los bufetes de élite estadounidenses, algunos de los estudios más antiguos de Londres ofrecen ahora a sus abogados una alternativa: horarios de oficina más cortos.
En 2021, Jie Clues-Low se licenció como abogada en el bufete Simmons & Simmons de Londres. Se espera que trabaje algunos fines de semana, pero está contenta de hacerlo porque sabe que puede tomarse días libres compensatorios. El salario medio de un abogado recién titulado en Simmons & Simmons es de 105.000 libras anuales (US$130.600).
“Si trabajo un fin de semana, se reconoce que estoy renunciando a algo”, dice Clues-Low. Para sus compañeros de otros bufetes “tiende a ser más una expectativa”.
Incluso después de que varios bufetes británicos subieran recientemente el sueldo de los abogados recién titulados a más de 100.000 libras anuales, sigue siendo una cantidad significativamente inferior a la de los principales bufetes estadounidenses de Londres. Sin embargo, la diferencia salarial parece perder importancia cuando se produce a costa de la flexibilidad personal y de la vida más allá de la oficina, dice Jonathan Best, director de atención al cliente de GoodShape, que asesora a las empresas sobre la salud y el bienestar de los empleados.
Después de todo, 100.000 libras para un nuevo empleado ya triplica el salario medio de los trabajadores de todas las edades en el Reino Unido en 2022.
“Son jóvenes estudiantes de Derecho ambiciosos, pero dicen: ‘no importa cuánto dinero me vayas a dar, no voy a trabajar cien horas a la semana’”, afirmó.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/GDOXWAC7BRAF3KZLARIAVC3GBI.jpg "Empresas innovan para retener talento tras la gran renuncia que dejó la pandemia")
Un análisis de Bloomberg de los datos recopilados por el sitio web de noticias del sector Legal Cheek expone lo que considera una compensación en la conciliación de la vida laboral y personal.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/TE5J52A7WBDQ7NGDSR27K7OCZ4.png "Los bufetes británicos pagan menos que sus rivales estadounidenses en Londres, pero ofrecen horarios más flexibles")
Los abogados no están solos. A pesar de la crisis del costo de vida, que implica trabajar más horas para pagar el alquiler, la hipoteca y la comida, dos tercios de los jóvenes profesionales de toda Europa afirman que no trabajarían para una empresa que no compartiera sus valores, y ni siquiera un aumento de sueldo les haría cambiar de opinión, según un estudio de LinkedIn.
Los que trabajan por dinero deben reconocer por qué trabajan donde lo hacen, dice Alex Hamilton-Baily, director de la práctica de servicios jurídicos y profesionales de la empresa de selección de personal Odgers Berndtson.
“Es como Goldman Sachs, nadie va a Skadden por el equilibrio entre trabajo y vida privada”, dijo Hamilton-Baily, refiriéndose a Skadden Arps, Slate, Meagher & Flom, el bufete estadounidense que paga a los abogados junior en Londres unas 165.000 libras tras dos años como becarios en el bufete.
Los portavoces de Skadden y Goldman declinaron hacer comentarios.
La mayor importancia concedida al equilibrio entre la vida laboral y personal también está cambiando las trayectorias profesionales. Según Hamilton-Baily, los bufetes de abogados están “realmente preocupados” por la pérdida de personas que optan por trabajar como asesores internos, donde el horario suele ser menos extremo, en lugar de convertirse en socios.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/6R5BIP7LVNADXHAF7UYTHSIIQQ.jpg "Las semanas de “trabajo desde cualquier sitio” son los nuevos viernes flexibles")
De vuelta a Simmons & Simmons, Clues-Low dice que suele desconectarse a las nueve, con descansos para comer y cenar, y que siempre termina a las cinco el viernes, porque prefiere conectarse el domingo por la noche para terminar las tareas.
“Quiero salir los viernes por la noche con mis amigos”, dice Jie. “Veo un futuro aquí”.
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