Bloomberg — Un veterano líder conservador catalán y cofundador del partido de extrema derecha Vox fue tiroteado en las calles de Madrid, ensombreciendo el acuerdo alcanzado a primera hora del día por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para formar un nuevo gobierno.
Alejo Vidal-Quadras, que lideró brevemente Vox como presidente hace una década, fue tiroteado en el centro de Madrid tras ser abordado por dos hombres, según informó el diario ABC. Se encuentra hospitalizado.
Antes de Vox, Vidal-Quadras había militado durante años en el Partido Popular, la principal formación conservadora de España, donde ocupó varios cargos electos.
El tiroteo se produjo después de que el partido socialista de Sánchez llegara a un acuerdo con un grupo separatista catalán, allanándole el camino para formar un nuevo gobierno. A cambio del apoyo, Sánchez se comprometió a aprobar un proyecto de ley de amnistía para cientos de catalanes que se enfrentan a cargos penales en relación con la fallida declaración de independencia de la región en 2017.
La amnistía ha sido objeto de críticas generalizadas por parte de Vox y el PP y se han producido protestas frente a la sede socialista en Madrid todas las tardes desde hace casi una semana. El líder de Vox, Santiago Abascal, ha participado en las manifestaciones.
“Esperamos que los servicios de seguridad del Estado atrapen cuanto antes a esos asesinos y que nadie les ofrezca nunca una amnistía”, dijo Abascal en una rueda de prensa televisada en la que tachó a Sánchez de dictador y apeló a sus seguidores a protestar con actos pacíficos de desobediencia civil.
Abascal también dijo que Vidal-Quadras, al que llamaba amigo, estaba fuera de peligro. Vidal-Quadras recibió un disparo en la cara y el autor de los disparos fue recogido por un cómplice que le esperaba en una moto, según ABC.
Con el apoyo de siete diputados de Junts, Sánchez está a punto de ganar una moción de confianza con el respaldo de 178 diputados en el Parlamento de Madrid, compuesto por 350 miembros. Aún así, la votación sólo se celebrará una vez que se acuerde la ley de amnistía y se registre un proyecto de ley en el Parlamento, lo que debe hacerse antes del 27 de noviembre o se convocarán nuevas elecciones.
Las dos partes “confirman que la situación política actual permite un acuerdo para abrir una nueva oportunidad de resolver el conflicto histórico en torno al futuro político de Cataluña”, dijeron. Acordaron negociar las normas fiscales, la autonomía financiera catalana y permitir que Junts proponga la celebración de un referéndum de independencia.
Ambos se oponen con vehemencia a la amnistía, que permitirá al expresidente catalán Carles Puigdemont regresar a España seis años después de que intentara dividir el país. El PP obtuvo el mayor número de escaños en las elecciones de julio, pero fue incapaz de formar una coalición de gobierno en una legislatura que sigue amargamente dividida por la cuestión catalana.
Las manifestaciones han incluido enfrentamientos con la policía, que ha utilizado gases lacrimógenos contra los manifestantes. Aunque las protestas se han dirigido contra el Gobierno y los separatistas, también ha habido cánticos islamófobos y críticas al PP, cuyos principales dirigentes se han mantenido al margen de las manifestaciones.
El propio PP ha convocado protestas en todo el país para el domingo.
Tras años al margen de la política nacional y con Puigdemont viviendo en un exilio autoimpuesto en Bélgica, el partido Junts tuvo la oportunidad de remodelar la agenda cuando Sánchez y sus socios más habituales se quedaron a un puñado de votos de la mayoría.
Ha tenido que ganar el liderazgo de su partido en dos ocasiones, tras haber sido derrocado por una revuelta interna la primera vez. Luego se hizo con el poder mediante la primera moción de censura que prosperó desde que España volvió a la democracia en 1978. Logró su segunda legislatura en 2020 con una minoría de 167 votos tras la abstención de 18 legisladores.
Después de que su partido fuera castigado por los votantes en las elecciones locales de mayo, que parecían indicar que el PP iba a volver al poder, Sánchez convocó unas elecciones anticipadas y consiguió negar la mayoría a los dos partidos de derechas, allanando el camino para el pacto de esta semana con Junts.
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