Buenos Aires — Javier Milei profundizó este año el recorte del gasto público que inició en 2023, cuando llegó a la Casa Rosada tras hacer campaña enarbolando una motosierra. Pese a ello, el presidente libertario todavía no pudo lograr que el gasto consolidado de Nación, provincias y municipios regrese a los niveles que mostraba en 2008 como porcentaje del PBI, previo al salto de cinco puntos porcentuales que registró al año siguiente bajo el primer mandato de Cristina Fernández de Kirchner.
Según estimaciones del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el gasto público primario nacional terminaría 2025 con una reducción anual de US$38.000 millones respecto al 2023, lo que llevaría a Argentina a terminar el 2025 con el gasto público primario devengado consolidado en 31,4% del PIB: 14,6% de ese valor corresponde al Estado nacional, 13,7% a los estados provinciales más la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y 3,1% a los municipios.
En 2008, año anterior a que Cristina Kirchner acelerara una fuerte expansión del gasto, el gasto agregado se ubicaba en 30,5% del PIB: 15,1% correspondía al Estado nacional, 12,8% a las provincias y 2,6% a los municipios.
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El camino ascendente que el Gobierno actual intenta desandar comenzó en 2009, cuando el gasto público primario devengado consolidado trepa a 35% del PIB. El pico del ciclo se da en 2015, último año de Cristina Kirchner como Presidenta, cuando se llega al 41,6% del PIB, con el Gobierno nacional gastando 22,3% del Producto ese mismo año.
Luego de 2015, el gasto empezó a bajar durante el macrismo (terminó en 36,4% consolidado en 2019), pero tuvo un repunte en 2020 (41,4% a nivel consolidado), debido a los gastos extraordinarios generados por la cuarentena. En los tres años subsiguientes del Frente de Todos, el gasto de todos los municipios agrupados se ubicó apenas por debajo del 38%.
¿Qué sucedió durante el Gobierno de Milei?
Milei heredó en 2023 un gasto consolidado de 37,9% (19,7% correspondía a Nación, 14,8% a las provincias + CABA y 3,4% a los municipios) y logró una rápida caída en 2024 hacia un consolidado de 31,6% (15,3% de Nación, 13,2% de provincias + CABA y 3% de municipios).
Si bien, como se mencionó, en 2025 habría continuado la caída, hacia un 31,4% total, la particularidad es que el conjunto provincias + CABA y los municipios tendrían una suba interanual de 13,2% a 13,7% y de 3% a 3,1%, respectivamente. La baja a nivel agregado se daría por la consolidación del Estado nacional (de 15,3% a 14,6%).
Recientemente, el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, se quejó de esto último en el marco de la presentación del informe final 2025 del Consejo de Mayo. “En el 2024 Nación, provincias y municipios bajaron fuertemente el gasto público en el consolidado. En el 2025, sin embargo, esta tendencia se cortó: Nación siguió cortando su gasto; provincias y municipios lo subieron”, señaló el funcionario.
No obstante, Adorni, rápidamente, aclaró: “No todas las provincias se comportaron de la misma manera. Me refiero al resultado final del gasto provincial. Un ejemplo de no cumplir con esta responsabilidad es, claramente, lo que ocurrió en el municipio de Pilar con la Tasa de Protección Ambiental, un delirio absolutamente sin sentido”.
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En esa ocasión, Adorni consignó que su objetivo es llegar al 25% del Producto. En la serie de IARAF, se puede observar que en 1997 y en 1998 el gasto fue de 25,2%. También se observan números más bajos a la salida de la crisis del 2001: en 2002, el gasto público consolidado de los tres estamentos del Estado fue del 24,5% y, en 2004, ya con Néstor Kirchner como presidente, cayó a 24%.
