El comportamiento de la divisa estuvo marcado por un fuerte impulso externo, amplificado por factores internos como el diferencial de tasas, la monetización de divisas y el componente electoral.
Los principales índices de Wall Street retrocedieron levemente en una jornada marcada por la expectativa ante el informe de empleo y la inflación de EE.UU., claves para las decisiones de la Fed.
La moneda chilena y la bolsa local reaccionaron con alzas inmediatas tras el resultado electoral, aunque luego retrocedieron tras la victoria ya descontada de Kast.
El impacto de la decisión fue inmediato en el mercado global: el índice dólar DXY cayó a 98,17, profundizando su debilidad y fortaleciendo monedas emergentes como el peso colombiano.
El Nasdaq se vio afectado por los gigantes tecnológicos y señales de que la Fed mantendría una política más estricta ante la persistencia de la inflación.
El crecimiento de EE.UU., la inteligencia artificial y la estabilidad monetaria marcarán el rumbo económico regional, según Vanguard, que advierte sobre valoraciones altas y ganancias aún débiles en América Latina.
El banco suizo anticipa un entorno favorable para los activos de riesgo, impulsado por estímulos fiscales, avances en inteligencia artificial y menor presión monetaria en las economías desarrolladas.
Tras sumar US$50 millones el miércoles en el mercado de cambios y obtener US$910 millones en su regreso a los mercados, el equipo económico anotó otra fuerte compra de divisas.
Este fortalecimiento del dólar no sería abrupto, sino más bien un proceso de apreciación gradual, consistente con episodios anteriores en los que el dólar recupera terreno después de periodos de debilidad.
El banco francés anticipa una política monetaria más contractiva en Colombia debido al recalentamiento de la demanda interna, una inflación persistente y presiones en el mercado laboral.
Los inversores evitaron tomar posiciones agresivas a la espera del anuncio clave de la Reserva Federal, mientras las señales de fragilidad del consumidor y la presión de los bonos impactaron al sector financiero.
El banco identifica oportunidades de inversión para el próximo año en un entorno de crecimiento moderado, tasas en descenso y expansión cíclica en los mercados emergentes.