Bloomberg — Especuladores que buscaban lucrarse con las ventas masivas en los mercados de Argentina fueron frenados en seco por un poderoso inversor dispuesto a tomar el lado opuesto de la operación: el gobierno de Estados Unidos.
La firme muestra de apoyo al presidente Javier Milei por parte del secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent -primero al comprometerse a utilizar “todas las opciones” y luego al anunciar un plan para proporcionar potencialmente un salvavidas de US$20.000 millones y comprar bonos argentinos- detuvo rápidamente una huida que estaba consumiendo las reservas del gobierno mientras este evitaba una corrida sobre su moneda.
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Independientemente de si el dinero se materializa o no, los inversores afirman que la sola perspectiva probablemente será suficiente para frenar el avance de las acciones, bonos y divisas argentinas antes de las elecciones nacionales clave a finales del próximo mes. Esto se debe a que pocos, si es que hay alguno, están dispuestos a respaldar una apuesta bajista que podría verse frustrada por otra señal de apoyo de EE.UU.
“Es un paquete descomunal y, viniendo de Scott Bessent, quien conoce los mercados, debería estabilizarse”, dijo Ray Zucaro, director de inversiones de RVX Asset Management LLC en Miami, quien actualmente mantiene una opinión neutral sobre los bonos argentinos. “Es difícil estar en corto”.
La posible intervención, que los comerciantes compararon con el rescate de México por parte de Bill Clinton a mediados de los años 1990, ofrece un raro descanso del estilo de nacionalismo económico de la administración Trump, en este caso para ayudar a un aliado ideológico asediado en un país cuyas crisis financieras han tenido poco impacto en Estados Unidos.
Milei, un economista libertario que impulsó la terapia de choque del libre mercado para poner fin a las crisis que han azotado al país durante décadas, tuvo cierto éxito en controlar la inflación galopante. Sin embargo, un escándalo político en torno a miembros de su administración y el enojo de los votantes por algunos de sus recortes de gastos le propinaron derrotas sorprendentemente considerables en las recientes elecciones locales, lo que generó temores entre los inversores de que sus reformas pudieran estancarse si sufre un revés en las elecciones nacionales de mitad de mandato del 26 de octubre.
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El resultado fue una fuerte venta que afectó a todo, desde los bonos en dólares hasta el peso y las acciones, y dejó al gobierno consumiendo reservas de divisas para evitar que su moneda rompiera su vínculo con el dólar estadounidense. Los mercados se recuperaron después de que los anuncios de Bessent el lunes y el miércoles aliviaran los temores de que las elecciones pudieran sumir a Argentina en otra crisis.
“Es probable que esto limite las pérdidas en caso de un mal octubre”, dijo Gorky Urquieta, codirector del equipo de deuda de mercados emergentes de Neuberger Berman.
La medida también ha reforzado la confianza en que Argentina evitará una escalada de la corrida cambiaria y dispondrá de dinero suficiente para cubrir sus próximas obligaciones. Está previsto que la administración Milei realice más de US$4.000 millones en pagos de deuda en enero.
“La probabilidad de impago durante el mandato de Milei disminuyó significativamente”, dijo Matías Montes, jefe de estrategia de EMFI Securities, con sede en Londres.
El uso potencial por parte de la administración Trump del Fondo de Estabilización Cambiaria del Tesoro -una reserva creada para promover mercados de divisas ordenados- envía una fuerte señal de que está dispuesta a utilizar el poder de EE.UU. para apoyar a Milei, a quien Bessent caracterizó como “aliado sistémicamente importante de EE.UU.”.
Para el miércoles por la noche, la promesa había impulsado al peso a un repunte de tres días que lo dejó en 1.337,50 pesos por dólar, su nivel más alto en casi un mes. Los bonos en dólares subieron en toda la curva, prácticamente borrando las pérdidas observadas tras la derrota del gobierno en las elecciones de Buenos Aires el 7 de septiembre. La principal bolsa del país registró una ganancia de tres días que la impulsó a un alza de más del 9%.
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La atención ahora se centra en si Milei puede conseguir suficiente apoyo político en octubre para seguir adelante con sus políticas, dijo Jeff Grills, director de deuda estadounidense de activos cruzados y mercados emergentes en Aegon Asset Management.
Dijo que el gobierno probablemente tendrá que revisar sus objetivos cambiarios según el acuerdo previo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional. Pero, en general, consideró positiva la ayuda estadounidense. “Les da tiempo”, afirmó.
Con la colaboración de Ignacio Olivera Doll.
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