Bloomberg Línea — Los serios problemas de violencia que afrontan las mujeres, que constituyen más de la mitad de la población chilena, quedaron relegados en el debate electoral entre los dos candidatos que este domingo disputarán la Presidencia del país: el aspirante de la ultraderecha, José Antonio Kast, de 59 años, y la candidata de la coalición de centro izquierda, Jeannete Jara, de 51 años.
Y no fueron las únicas excluidas: las políticas dirigidas a niños y adolescentes —que representan el 24,3% de la población— también pasaron inadvertidas.
René Jara Reyes, profesor asociado de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Santiago de Chile, dice que los mensajes más potentes y repetitivos, por parte de ambos candidatos a lo largo de la campaña electoral, se centraron en dos temáticas específicas.
“Las campañas han estado absorbidas completamente por los temas de urgencia”, dijo Jara. “Uno tiene que ver con la seguridad y las preocupaciones por los problemas de delincuencia y del narcotráfico que se han expandido en Chile y, por otro lado, están las cuestiones económicas”.
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En 2024 se ingresaron al Ministerio Público 86.323 hechos delictivos relacionados con crimen organizado, un 21,6% más que en 2023, de acuerdo con la Segunda edición del Indicador Nacional de Crimen Organizado 2022–2024, del Centro de Estudios en Crimen Organizado (CESCRO) de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad San Sebastián,
Aunque Chile no se encuentra entre los países con las tasas de muertes violentas más altas en América Latina como Ecuador, Colombia o México, la percepción de inseguridad de los chilenos es alta. De acuerdo con la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (ENUSC), en 2024, un 87,7% de las personas percibieron un aumento de la delincuencia en Chile, aunque solo 17,7% de los hogares encuestados afirmó haber sido víctima de robos, y un 8,5% de delitos violentos.
En cuanto a la economía, la principal preocupación de los chilenos es el empleo. Durante el tercer semestre de 2025, según el Instituto Nacional de Estadísticas, Chile tenía una tasa de desocupación nacional del 8,5% y una tasa de ocupación informal del 25,8%, en el tercer semestre de 2025.
Jara Reyes, también magíster en Ciencia Política, dice que temas como la eutanasia, la diversidad sexual, así como las discusiones sobre género e infancias quedaron relegadas. “Hoy en día, estas temáticas están poco presentes, aunque aparecen de manera episódica pero no sostenida en el tiempo”.
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Por ejemplo, en el penúltimo debate organizado por la Asociación de Radiodifusores de Chile (Archi), algunas preguntas hacia los candidatos que estuvieron relacionadas con la eutanasia, la educación a la niñez transgénero y la violencia hacia las mujeres, pusieron en aprietos al candidato de la ultraderecha, José Antonio Kast, quien contestó en reiteradas ocasiones con evasivas.
Jara Reyes cree que esa fue una ventaja para la candidata de la coalición de centro izquierda Unidad por Chile, que agrupa a varios partidos y movimientos de izquierda y centroizquierda. “Ella está haciendo todos los esfuerzos para desplazar justamente al candidato a esos territorios o a esas discusiones que lo conflictúan por temas valóricos”, dice.
Los retos en temas de género
Luz Reidel Wagner, abogada y subdirectora de Incidencia Social y Política en Corporación Miles -organización que lleva una década dedicada a promover los derechos de las mujeres y, específicamente, los derechos sexuales y reproductivos- concuerda, en cierta medida, con Jara Reyes. Asegura que, efectivamente, durante la primera vuelta electoral, la derecha marcó una agenda enfocada específicamente en temas de seguridad desprovistos de perspectiva de género y que la izquierda siguió ese ritmo.
Sin embargo, en la segunda vuelta electoral, cree que los temas relacionados con género tomaron algo más de relevancia, especialmente en los “debates organizados por la sociedad donde se vio de una manera mucho más nítida un espectro mucho más amplio de preocupaciones de las personas por sobre la economía y la seguridad”.
Este fue el caso de un espacio denominado “Foro Social”, que se desarrolló el pasado 27 de noviembre en un medio de alcance nacional, en el que representantes de la sociedad civil entrevistaron a los dos candidatos a la Presidencia de Chile sobre derechos sociales.
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Para Reidel Wagner, hay tres temáticas fundamentales que, a su criterio, deberá encarar el próximo gobierno, ya sea de izquierda o de derecha: la implementación de la Ley Integral de Violencia, pues en lo que va de 2025 Chile registra 40 femicidios y 277 femicidios frustrados, según el Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (Sernameg); en segundo lugar, se encuentra el desempleo femenino, que llega a 10,1% este año según datos oficiales, y el aborto.
La Ley 21.030 regula ya la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) en Chile bajo tres causales: riesgo vital para la mujer, inviabilidad fetal letal (el feto no puede sobrevivir fuera del útero) y violación hasta la semana 14. Sin embargo, ahora se tramita un proyecto de ley para despenalizar el aborto libre hasta esa misma semana sin especificar ninguna causal. La iniciativa fue presentada al Congreso el pasado 28 de mayo.
Sobre la iniciativa de ley, Reidel Wagner tiene una preocupación: “Vamos hacia una dicotomía en que la podemos avanzar y otra postura en la que podemos retroceder en el ámbito del aborto y de las tres causales” para permitir la interrupción del embarazo de manera legal, explicó a Bloomberg Línea.
En este punto sensible, los candidatos muestran diferencias sustanciales. Kast, que representa al Partido Republicano, ha manifestado en repetidas ocasiones, su oposición al aborto. En su programa de gobierno especifica que apoya “el embarazo vulnerable para que toda mujer que enfrente un embarazo en contextos de adversidad tenga acceso inmediato para atención gratuita y profesional”. El programa de Kast no especifica a qué se refiere con embarazos en contextos de adversidad, pero el candidato ha manifestado públicamente que defiende la vida desde el feto.
Por su parte, la candidata Jara asegura que continuará con la tramitación del proyecto de ley sobre el aborto libre hasta la semana 14 que hoy se debate en el Congreso.
Según el Diagnóstico sobre la Situación de Derechos de la Niñez y Adolescencia 2025, presentado por la Defensoría de la Niñez, en 2024 se realizaron 89 interrupciones de embarazo de niñas y adolescentes. El 88% de los casos fue por violación. Dentro de esta causal, el 58% de los casos corresponde a niñas de menos de 14 años.
Reidel Wagner asegura que desde la sociedad civil temen que haya retrocesos si llega a Chile a un gobierno conservador. “Los retrocesos no se generan sólo a partir de la derogación de las leyes. Vemos con mucha preocupación lo que pasa en Argentina con el gobierno de Milei, donde si bien no se ha derogado la ley de aborto, lo que se ha hecho es recortar los presupuestos, al punto que no hay medicamentos disponibles para llevar a cabo estos procedimientos”, cuestiona la experta.
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Una deuda histórica con la infancia
Para Camila Berríos, coordinadora de Pacto Niñez, que agrupa a 130 organizaciones en Chile dedicadas a la promoción y protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes, la niñez ha sido prácticamente invisible en los debates presidenciales, políticos y en la agenda comunicacional a lo largo de la historia. “Si bien seguimos en ese escenario, creo que hay un avance”, aseguró Berríos a Bloomberg Línea.
Como un hito importante destacó que antes de la primera vuelta electoral, Pacto Niñez y otras organizaciones de la sociedad civil relacionadas con educación e infancias, lograron la realización de un debate televisivo con los ocho candidatos sobre el tema. “Nos hubiese encantado que en los próximos debates de Anatel o de Archi se continúe preguntando a los candidatos sobre la niñez. Eso no ocurrió, no fue sostenido, pero al menos tuvimos un primer espacio”.
Para Berríos, hay tres temas fundamentales que deben ser atendidos con urgencia por el próximo presidente: la salud mental, el aumento de la violencia, y la pobreza en niños y adolescentes.
Según datos de la Encuesta Longitudinal de Primera Infancia (ELPI) 2024, del Ministerio de Desarrollo Social, una de cada tres adolescentes mujeres (33,9%) presenta síntomas de depresión o ansiedad moderados o severos. Entre los adolescentes hombres, la cifra llega a 19,5% y entre las causas se destacan el cyberbullying y las brechas socioeconómicas que se extienden desde la primera infancia.
Respecto a la violencia, los datos del Observatorio de la Niñez también son alarmantes: uno de cada dos niños, niñas y adolescentes en Chile vive en barrios con violencia crítica. “Son niños y niñas que ven balaceras o peleas frecuentes en sus entornos. Esto afecta a unos dos millones de niños y niñas en el país”, asegura Berríos.
A la par, afirma que la pobreza es otro problema que ocurre, con mayor frecuencia, en campamentos en los que los niños y niñas viven hacinados y sin servicios básicos.
La Coordinadora de Pacto Niñez reconoce que, si bien hay propuestas en los programas de Jara y Kast para la niñez y adolescencia sobre protección, salud mental, cuidado a la primera infancia y educación, estos no tienen un enfoque preventivo e integral.
“Buscamos que las propuestas sean robustas, que no se queden en la superficialidad (...). Sabemos que, si invertimos en infancia, sobre todo en la primera infancia, vamos a tener un país mucho más rico y con un gasto fiscal menor para más adelante. La niñez es una etapa donde se establecen los cimientos de la vida”, dice Berríos.
Con esta postura concuerda el académico Jara Reyes, quien afirma que es un gran error no tomar en cuenta la opinión de los niños y niñas en los debates públicos. “Esto ocurre porque los niños simplemente no votan”, apunta.
“Hay una especie de paradoja, porque las infancias son el futuro de esta sociedad, pero al mismo tiempo son muy poco contempladas los debates”, dice el profesor. "Somos una sociedad adultocéntrica, que está centrada en los problemas de los adultos y en ese sentido cometemos el enorme error de pensar que las infancias no son parte fundamental para fortalecer la democracia”.
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