Bloomberg Línea — El Congreso de la República del Perú destituyó esta madrugada a la presidenta Dina Boluarte Zegarra por “permanente incapacidad moral”, tras aprobar, con una abrumadora mayoría, cuatro mociones de vacancia sustentadas en presuntos casos de corrupción, abandono de funciones y falta de liderazgo ante la inseguridad ciudadana.
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La votación, realizada en una sesión extraordinaria la noche del jueves 9 de octubre y concluida pasada la medianoche del viernes 10, selló la caída de la mandataria de 63 años, quien no acudió al hemiciclo a ejercer su defensa.
Las cuatro mociones de vacancia, presentadas por distintas bancadas entre las 16:27 y las 17:46 del jueves, fueron admitidas a debate por amplia mayoría en la misma jornada y articulaban diversos cuestionamientos a su gestión, desde los viajes y el caso de los relojes de lujo hasta la omisión de medidas efectivas contra el crimen organizado.
Las mociones de vacancia, numeradas 19769, 19770, 19771 y 19772, fueron impulsadas por congresistas de distintas bancadas, entre ellos, Bloque Democrático Popular, Bancada Socialista, Juntos por el Perú-Voces del Pueblo-Bloque Magisterial y Renovación Popular.
• Moción 19769
Contó con la firma de 35 legisladores de las bancadas Bloque Democrático Popular, Podemos Perú, Juntos por el Perú – Voces del Pueblo – Bloque Magisterial, Perú Libre, Renovación Popular, Bancada Socialista, Honor y Democracia, y dos congresistas no agrupados.
El argumento principal se basó en declarar la permanente incapacidad moral de Boluarte, conforme al artículo 113.2 de la Constitución.
Los congresistas también aludieron a denuncias de corrupción, abandono de cargo por viajes “con ley a medida”, delitos de negociación incompatible, abandono de cargo por intervenciones estéticas, y una gestión deficiente, especialmente con la inseguridad ciudadana.
• Moción 19770
Promovida por Norma Yarrow junto con congresistas de diversas bancadas, los argumentos de esta moción se centraron en la inseguridad ciudadana que ha alcanzado niveles críticos bajo su gestión. Además de su falta de liderazgo, coordinación y voluntad política para enfrentar el crimen organizado; el costo de la criminalidad, de unos 20.000 millones de soles (US$5.812 millones) al año, lo que equivale al 1,7% del Producto Bruto Interno (PBI).
“La crisis de inseguridad ciudadana continúa afectando gravemente al sector transporte en el Perú (…). Lo que antes se consideraba un problema focalizado se ha convertido en una amenaza estructural que paraliza rutas, pone en riesgo la vida de los conductores y desestabiliza la economía nacional", según los motivos de la moción.
Además, se mencionó que el impacto “no solo refleja el incremento del gasto público en seguridad, sino también las pérdidas por menor inversión privada, fuga de capitales y reducción de la productividad empresarial”.
Los congresistas también criticaron la gestión comunicativa de Boluarte durante el paro de transportistas, cuando ella instó a “no abrir mensajes ni contestar llamadas de números desconocidos” para prevenir extorsiones, lo que consideraron desconectado de la realidad.
• Moción 19771
Firmada por los congresistas de Juntos por el Perú – Voces del Pueblo – Bloque Magisterial, Podemos Perú, Renovación Popular y Bloque Democrático Popular, con 28 firmas.
Los legisladores expusieron que la inacción frente al incremento del crimen organizado, la extorsión y el sicariato demuestra una grave omisión del deber constitucional.
“Las cifras de criminalidad han escalado sin una estrategia efectiva que permita reducir el impacto de estos delitos”, indicaba el texto literal de la moción. También se afirmó que Boluarte había “fallado en su deber de garantizar la seguridad y el orden interno, lo que demuestra su falta de idoneidad para seguir ejerciendo el cargo”.
• Moción 19772/2025
Contó con la firma de 27 congresistas de las bancadas Socialista, Juntos por el Perú – Voces del Pueblo – Bloque Magisterial, Renovación Popular, Podemos Perú, Honor y Democracia, Bloque Democrático Popular, Somos Perú y congresistas no agrupados.
Entre los argumentos destacados, señalaron a Boluarte de incapacidad total para dirigir la lucha contra delincuencia y crimen organizado, además de abandonar funciones injustificadamente y de ocultar la “suspensión fáctica” de sus facultades.
El texto de la moción recordó “conductas sistemáticas inmorales vinculadas a atentados contra la vida y la seguridad de la población, corrupción de funcionarios, desbalance patrimonial”, incluyendo el caso de los Rolex, supuesto enriquecimiento ilícito y corrupción.
Votación final y la caída de Boluarte
Una vez admitidas las mociones, el Congreso aprobó debatirlas y votarlas la misma noche, con el respaldo de más de las cuatro quintas partes del número legal de congresistas.
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La votación final para declarar la vacancia de Dina Boluarte culminó con 122 votos a favor, sellando su salida inmediata del cargo bajo el argumento de permanente incapacidad moral, como establece el artículo 113, inciso 2 de la Constitución Política del Perú.
Con la vacancia oficializada, el Congreso activó el mecanismo de sucesión presidencial.
En la madrugada del viernes, José Jerí Oré, líder del Congreso, juró como nuevo presidente de la República.
Además, el primer vicepresidente del Congreso, Fernando Rospigliosi, asumió como presidente a.i. del Congreso de la República.
