Bloomberg — Las fuerzas rusas golpearon la capital de Ucrania con un ataque aéreo masivo en vísperas de las conversaciones entre Volodymyr Zelenskiy y Donald Trump destinadas a concretar un plan para poner fin a la guerra de Moscú.
El presidente ucraniano dijo el sábado a la prensa desde su avión que hará escala en Canadá de camino a Estados Unidos, donde se reunirá con el primer ministro, Mark Carney, y mantendrá una videollamada con los líderes europeos. Zelenskiy reiteró la necesidad de Ucrania de contar con garantías de seguridad jurídicamente vinculantes por parte de los aliados si se pone fin a las hostilidades.
Más de 500 aviones no tripulados y 40 misiles -incluidas armas hipersónicas Kinzhal- fueron lanzados en ataques que continuaron hasta bien entrado el sábado, dijo Zelenskiy en las redes sociales. Las sirenas antiaéreas han continuado sonando en la capital durante más de diez horas.
“Los representantes rusos entablan largas conversaciones, pero en realidad, los Kinzhals y los ‘Shaheds’ hablan por ellos”, dijo Zelenskiy.
La descarga mató a una persona en Kiev e hirió al menos a 27, interrumpió el suministro eléctrico y de agua y provocó incendios en varios distritos. Alrededor de un tercio de la ciudad de más de 3 millones de habitantes se quedó sin calefacción con temperaturas que rondaban el punto de congelación.
Más de 600.000 hogares de Kiev y la región circundante están sin electricidad, según declaró en Telegram la primera ministra, Yuliia Svyrydenko. “Los rusos están llevando a cabo una campaña basada en infundir agotamiento, frío y miedo”, añadió.
Varios edificios residenciales de gran altura, así como coches y otras propiedades, fueron incendiados, dijo el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, en Telegram. Al menos 11 personas fueron hospitalizadas. Las autoridades impusieron cortes de electricidad de emergencia en la capital, anulando los apagones progresivos que ya se habían programado, mientras que el suministro de agua también se vio interrumpido.

La región de Chernihiv, en el norte de Ucrania, también sufrió cortes de electricidad, según informó el Ministerio de Energía ucraniano.
El ministerio de defensa ruso dijo en un post en Telegram que sus ataques “tuvieron como objetivo la infraestructura energética utilizada por las fuerzas armadas de Ucrania, así como las instalaciones de la industria de defensa”, y que “todos los objetivos fueron alcanzados”.
La andanada se produjo un día antes de que Zelenskiy se reúna con Trump en Palm Beach, Florida, en busca de un acuerdo para poner fin a la invasión rusa de casi cuatro años.
Zelenskiy dijo el viernes que planea perfeccionar al máximo los acuerdos de Kiev con EE.UU., y que un plan de paz global de 20 puntos requerirá entonces la aportación de Rusia y Europa. Tiene previsto discutir con Trump cuestiones delicadas, como el futuro del Donbás y de la central nuclear de Zaporizhzhia, así como una hoja de ruta a largo plazo para la maltrecha economía ucraniana.
La reunión del domingo está fijada para las 15:00 hora local, según la agenda oficial de Trump. El líder estadounidense está pasando las fiestas en su club de Mar-a-Lago.
Además de Zelenskiy, el equipo negociador ucraniano incluirá al alto enviado Rustem Umerov, al ministro de Economía Oleksii Sobelev, al jefe del Estado Mayor Andriy Hnatov, al asesor de la oficina presidencial Oleksandr Bevz y al primer viceministro de Asuntos Exteriores Sergiy Kyslytsya.
Zelenskiy declaró a Axios el viernes que está dispuesto a someter a referéndum un eventual acuerdo marco si Rusia acepta un alto al fuego de al menos 60 días.

El sábado, Zelenskiy dijo que estaba “políticamente preparado” para las elecciones, pero que Ucrania necesita prepararse en términos de una legislación adecuada, y que espera que Rusia intente socavar la legitimidad de cualquier votación.
“Si la parte estadounidense plantea la cuestión de un referéndum o unas elecciones, definitivamente no pueden tener lugar en las condiciones en las que vivimos hoy, es decir, los ataques”, añadió.
Trump, por su parte, habló el viernes con el presidente de Polonia, Karol Nawrocki, según informó la oficina del mandatario polaco en un comunicado. Un ayudante dijo a la agencia estatal de noticias polaca PAP que Nawrocki recalcó a Trump que Putin era el agresor en el conflicto con Ucrania.
Mientras Zelenskiy se dirige a EE.UU., los comentarios de Moscú a última hora del viernes plantean dudas sobre lo cerca que podría estar un acuerdo final.
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El viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Ryabkov, en una entrevista con la televisión estatal, describió los últimos planes de Kiev como “radicalmente diferentes” de los puntos clave que Moscú ha discutido con EEUU en las últimas semanas.
Ucrania y sus aliados europeos han “redoblado sus esfuerzos para torpedear” cualquier acuerdo que ponga fin al conflicto, afirmó Ryabkov.
Una persona cercana al Kremlin dijo a Bloomberg News a principios de semana que Moscú buscará cambios clave en el plan EE.UU.-Ucrania, incluyendo más restricciones al ejército de Kiev.
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