La nueva mejor batería para autos eléctricos está aquí, y es más barata que nunca

Bloomberg — No faltan las empresas de baterías para vehículos eléctricos ni las inversiones multimillonarias en el sector, en un momento donde las compañías, los patrocinadores y los científicos buscan la carta ganadora. Sin embargo, China ya está pasando a la siguiente etapa de la carrera (que no depende de un gran y audaz avance) con las baterías de iones de sodio. Si se hace bien, esta tecnología podría llevar a una adopción generalizada en un mercado que depende en gran medida de los subsidios y en el que las ventas de vehículos eléctricos siguen siendo una fracción de todos los autos.

La empresa china Contemporary Amperex Technology Co., o CATL, el mayor fabricante de baterías del mundo, presentó en julio su último producto: una batería de iones de sodio. Al mes siguiente, el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información de China dijo que impulsaría el desarrollo, la estandarización y la comercialización de este tipo de batería, la cual proporcionaría una alternativa más barata, de carga más rápida y segura a la oferta actual, que sigue estando plagada de problemas, entre los que se destaca el incendio de unidades defectuosas.

Las baterías de iones de sodio no son un desarrollo nuevo. Se estaban investigando en la década de 1970, pero el interés fue rápidamente superado por una variedad más nueva, más elegante y más prometedora: la batería de iones de litio. Su uso generalizado significó que los modelos basados en sodio no tuvieran muchos interesados y cualquier desarrollo en curso quedó en segundo plano.

Ahora, décadas después, los desafíos con las baterías de iones de litio se están volviendo evidentes. Los fabricantes de automóviles y de baterías se centran en reducir los costos, un obstáculo constante. Y aunque las baterías de iones de litio han sido uno de los mayores inventos en el campo del almacenamiento de energía, cada vez se enfrentan más a problemas que incluyen el costo y la disponibilidad de materiales y la seguridad. Hay un tire y afloje constante entre la química estable, para que la batería no combustione y se tenga una mayor densidad energética. Las soluciones claras han confundido a los científicos en gran medida y lo que está disponible no es lo suficientemente bueno para hacer que los iones de litio sean escalables y comercialmente viables para los vehículos eléctricos.

Las baterías a base de sodio no van a llevar a los coches eléctricos más lejos de lo que puede hacerlo el litio. Al menos, no a corto plazo. Sin embargo, los materiales necesarios para fabricarlas están ampliamente disponibles. El contenido de sodio en las reservas de la tierra es de entre el 2,5% y el 3%, es decir, 300 veces más que el litio y está más distribuido, según analistas de Jefferies Group LLC. Eso significa que tiene una gran ventaja en cuanto a costes:Podrían costar entre un 30% y un 50% menos que las opciones más baratas de baterías para coches eléctricos disponibles en la actualidad. Además, el precio del sodio es menos sensible a las oscilaciones del mercado en comparación con el litio, que cada vez es más un indicador de las ambiciones ecológicas del mundo.

Y aunque las baterías de iones de sodio actualmente tienen una densidad de energía relativamente más baja, funcionan mejor a temperaturas más frías y tienen una mayor vida útil, lo que las convierte en una mejor inversión a largo plazo, en teoría. Se espera que el último producto de CATL tenga una densidad de energía de 160 vatios-hora por kilogramo y tarde 15 minutos en alcanzar el 80% de su carga. Eso está a la par con las baterías que actualmente están en el mercado. Las mejores existentes (que han demostrado ser combustibles en ocasiones). van desde 140 Wh/kg a 180 y 240 las del mejor tipo existente

Las baterías de iones de sodio necesitarán una nueva cadena de suministro, ya que no pueden depender de las ya establecidas de iones de litio. Sin embargo, el bajo costo de los materiales significa que los gastos de fabricación se reducirán y que será más rápido perfeccionar los procesos de producción existentes para actualizar estas baterías más antiguas. CATL ha dicho que tendrá una cadena de suministro en marcha para 2023. Otras empresas como HiNa Battery Technology Co. ya tienen proyectos en marcha.

En última instancia, la capacidad de poner en el mercado opciones más baratas y seguras también significa una amplia accesibilidad para los consumidores preocupados por el precio o los países con recursos limitados. Países como India y Sudáfrica compiten por subirse al carro del coche eléctrico con grandes y ambiciosos planes para alcanzar los objetivos ecológicos mundiales. Sin embargo, no tienen los recursos ni el acceso a ellos, ni financieros ni de materias primas. Opciones como la batería de iones de sodio ofrecen una vía clara para pasarse a la electricidad y avanzar en sus objetivos de cambio climático.

Quien consiga dominar la siguiente batería mejor, gana.