Bloomberg — Este lunes, dos senadores estadounidenses expresaron su preocupación a Mark Zuckerberg, CEO de Meta Platforms Inc. (META) sobre el riesgo de que los desarrolladores de China y Rusia tengan acceso a los datos de los usuarios.
En una carta, Mark Warner, demócrata de Virginia y presidente del Comité de Inteligencia del Senado, y Marco Rubio de Florida, el republicano más importante del panel, citaron documentos de un caso judicial que dicen que la unidad de Facebook de Meta sabía en 2018 que “cientos de miles de desarrolladores en países que Facebook caracterizó como de “alto riesgo”, incluida la República Popular China (RPC), tenían acceso a cantidades significativas de datos confidenciales de los usuarios.”
Los senadores dijeron que su personal había mantenido reuniones con ejecutivos de la compañía para determinar quién, exactamente, podía acceder a los datos, y qué planeaba hacer Facebook al respecto, particularmente con respecto a la protección de la información de los usuarios.
“Dadas esas conversaciones”, escribieron Warner y Rubio, “nos sorprendió enterarnos recientemente, como resultado de este litigio y descubrimiento en curso, que Facebook había llegado a la conclusión de que una gama mucho más amplia de desarrolladores con sede en el extranjero, además de los fabricantes de dispositivos con sede en la República Popular China, también tenían acceso a estos datos”.
Según los senadores, esto incluía a 42.000 desarrolladores de Rusia, Corea del Norte e Irán.
En un comunicado, la empresa afirma que los documentos “son un artefacto de un producto diferente en un momento diferente. Hace muchos años, hicimos cambios sustanciales en nuestra plataforma, cerrando el acceso de los desarrolladores a tipos clave de datos en Facebook, al tiempo que revisábamos y aprobábamos todas las aplicaciones que solicitaban acceso a información sensible.”
Los senadores formularon a Zuckerberg una serie de preguntas, entre ellas si la empresa pudo identificar a los desarrolladores, las comunicaciones con ellos y facilitar qué tipo de información podrían haber obtenido los desarrolladores de China y Rusia.
Con la asistencia de Michael Bruning.
Lea más en Bloomberg.com