Bloomberg — Tras la evolución positiva de las negociaciones sobre el techo de la deuda estadounidense, el índice DAX alemán está a punto de alcanzar un máximo histórico al cierre de la sesión. Ello sigue a los hitos vistos también en el CAC 40 de Francia y el FTSE 100 del Reino Unido este año.
A las 10:54 de la mañana en Fráncfort, el índice de referencia subía un 0,7%, lo que le sitúa en posición de superar el máximo anterior, establecido el 5 de enero de 2022, antes de la invasión de Rusia a Ucrania. Compañías como Rheinmetall AG, una empresa de defensa y piezas de automóviles, Siemens Energy AG, especializada en turbinas de gas y tecnología de redes, así como Adidas AG y SAP SE, la mayor empresa de software de Europa, han sido algunas de las que más han subido a lo largo del año.
Varios factores han contribuido al repunte del mercado, entre ellos unos beneficios empresariales mejores de lo esperado, un descenso de los precios de la energía y el impacto económico positivo de la reapertura de China tras los confinamientos por Covid-19. Además, el DAX, que incluye los principales fabricantes de automóviles y empresas industriales, se ha beneficiado de un mayor optimismo respecto a una contracción económica potencialmente menos grave de lo previsto.
“El DAX está impulsado por los valores industriales y de consumo orientados a la exportación, y con el descenso de la inflación, los consumidores tienen más renta discrecional para gastar”, afirma Joachim Klement, responsable de estrategia, contabilidad y sostenibilidad de Liberum Capital. “Gracias a la recuperación de la demanda china, los valores industriales y automovilísticos alemanes también se han revalorizado sustancialmente”.
Los valores europeos han superado a sus homólogos mundiales este año, encabezados por el CAC 40, con un elevado peso de los bienes de lujo, en medio de la reactivación de la demanda de consumo china.
--Con la colaboración de Jan-Patrick Barnert.
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