Buenos Aires — ¿Será el 2026 el año de la lluvia de inversiones extranjeras en Argentina? Con RIGI y reformas, el Gobierno de Javier Milei espera que así sea. Hasta ahora, en lo que respecta a la economía real, las cifras revelan el escepticismo de los inversores con el país.
Entre enero y noviembre del 2025, la inversión directa de no residentes registró un flujo negativo de US$1.800 millones, según el reciente informe de Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario. La cuenta incluye todos los movimientos a través del mercado de cambios vinculados a los aportes de capital y las repatriaciones de inversiones entre inversores directos no residentes y sus empresas de inversión directa.
También ha habido salida de multinacionales, aunque en menores niveles que años anteriores. Y esa salida sirvió en algunos casos para fortalecer a empresas locales: como la compra de Petronas Argentina por Vista Energy, de Telefónica Argentina por Telecom o de Procter & Gamble por Newsan.
VER MÁS: Expectativas de los CEOs argentinos para 2026: rentabilidad, contrataciones y entorno macro
Perspectivas para el 2026
Según Juan Tripier, director de PwC Argentina, hay un cambio del clima inversor desde la asunción de Javier Milei pero “el trabajo de credibilidad no se hace de un día para otro”. El analista señaló que la volatilidad que generó el proceso electoral en 2025 no ayudó, pero asegura que “hay un cambio de ánimo a partir de noviembre”.
Tripier menciona dos aspectos positivos. Por un lado, las inversiones realizadas por empresas nacionales en sectores estratégicos, como el oil & gas. Y también la presencia de multinacionales de peso en operaciones de fusiones y adquisiciones como Rio Tinto y Tether.
Para el 2026, el especialista cree que la estabilidad política, estabilidad macroeconómica y las reformas que discute el Congreso confluirán a favor de las inversiones extranjeras, que las ve en mayor medida en la infraestructura alrededor del sector petrolero, en minería y tecnología.
“Vemos un 2026 muy positivo. Argentina aún se está normalizando. No vamos a tener una lluvia (de inversiones). No estamos cerca del verdadero potencial, es algo que lleva tiempo construir”, concluyó Tripier.
Inversiones RIGI
El Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) es la Ley promovida por Milei para atraer desembolsos en sectores estratégicos, al crear un marco de beneficios y estabilidad por treinta años. A la fecha se han aprobado diez inversiones por un total de US$16.665 millones.
Según las obligaciones de inversiones mínimas que indica la Ley, se estima que hasta el fin del mandato de Milei ingresen al país cerca de US$5.500 millones. El monto podría ser mayor dado que hay al menos otros diez proyectos en evaluación. El RIGI tiene vigencia hasta agosto de este año, pero el Gobierno analiza hacer uso del año de prórroga que establece la Ley. Además, evalúa ampliar los beneficios a otros sectores.
De los 10 proyectos aprobados, dos proyectos son del sector de gas y petróleo (GNL y oleoducto), dos de energías renovables, una mina de cobre, dos plantas de litio, una mina de oro, una planta de acero y un puerto multiuso. Del total de estas inversiones, cuatro son encabezadas por grupos extranjeros.
LEA MÁS: Exclusiva: el empresario español detrás del primer RIGI del oro en Argentina
Fusiones y adquisiciones
En 2025 se completaron 75 operaciones de fusiones y adquisiciones (totales o minoritarias) que involucran activos argentinos, por un total de US$13.700 millones, US$2.500 millones por encima de los completados en 2024, según información de Bloomberg.
La principal operación fue la adquisición de Arcadium Lithium por parte de Rio Tinto, que pagó US$6.600 millones para convertirse en la principal productora de litio de Argentina. Por detrás figura la compra de Telefónica Argentina por Telecom por US$1.200 millones, en una transacción que aún debe ser aprobada por los organismos de control.
Apenas más atrás figuran los US$1.200 millones que invirtió Vista Energy para adquirir los activos en el país de Petronas. En el cuarto lugar está la operación más reciente: la compra de Profertil por Adecoagro (empresa adquirida este año por Tether), que desembolsó US$1.100 millones para quedarse con las acciones de Nutrien e YPF. En quinto lugar está la compra por US$1.000 millones de Despegar.com ejecutada por Prosus.
¿Qué pasará con los commodities?
Soja, petróleo, gas, oro y cobre son algunos de los commodities que pueden motorizar las inversiones en Argentina en 2026. Para que esas inversiones se concreten será clave lo que suceda con los precios.
La lupa estará en el petróleo. La baja del precio en 2025 impactó en una menor actividad en la formación no convencional de Vaca Muerta. Y no se esperan alzas en el brent para el 2026. “El consenso de los analistas proyecta que el precio del crudo se mantendría en torno a los US$55, en un escenario que se encontrará marcado por sobreoferta e inventarios elevados”, señala un informe de IOL Inversores.
LEA MÁS: Proyecciones del oro para 2026: las expectativas para el precio de la onza
El broker se definió neutral respecto al oro, al señalar que la expectativa de que concluya la guerra entre Ucrania y Rusia podría moderar la demanda por activos de cobertura. El récord alcanzado por el metal incentivó a distintas empresas a reactivar y acelerar proyectos en el país, como Barrick Gold con la presentación al RIGI para extender la vida útil de Veladero; o Minas Argentinas con el proyecto Gualcamayo.
Con el cobre, IOL Inversores es optimista. Las subas del metal rojo motivaron a Glencore a reactivar una mina en Argentina. El optimismo responde al rezago relativo frente a otros metales y a que “se trata de un insumo clave para el desarrollo de infraestructura eléctrica”.
Privatizaciones
La venta de activos con participación del Estado puede ser otro atractivo para inversiones. En febrero la estadounidense ARC Energy se quedó por US$27 millones con IMPSA (más un proceso de reestructuración de deuda por 576 millones). Las nuevas concesiones para las represas del Comahue por treinta años garantizó ingresos para el Estado Nacional por US$707 millones. El Gobierno tasó inicialmente su participación del 50% en Citilec (controlante de Transener) en US$205 millones. Esa participación será parte de una compulsa de la que podrán participar jugadores nacionales e internacionales.
A esas ventas se suma la licitación para la concesión de la Vía Navegable Troncal, la concesión para los servicios de los ferrocarriles de carga, la venta de acciones en Nucleoeléctrica Argentina y AySA, entre otros.













